Un año más Halloween ha dado mucho de sí. Mientras unos se divertían disfrazándose de muertos vivientes, zombies o brujas, otros han decidido irse de boda. En el programaToday Show de la NBC se propusieron recrear la boda del príncipe Guillermo y Catherine Middleton para celebrar este terrorífica y esperada noche, con la que más que miedo lo que provocaron fueron risas.
Cualquier parecido con la realidad podemos decir que fue casi pura coincidencia, pues aunque los vestuarios fueron muy similares a los que vimos el pasado 29 de abril en la boda de los duques de Cambridge, el parecido físico de los protagonistas dejaba mucho que desear, detalle que hizo que la boda real adquiriera el calificativo de "irreal".
El príncipe Guillermo se había echado unos cuentos años más encima y Catherine había adquirido unos rasgos orientales difíciles de encontrar en la realidad. Sin embargo sus formas fueron exquisitas, hasta que Guillermo perdió la compostura lanzándose a besar a su abuela, a quien le salió la pamela volando.
Pippa Middleton fue, una vez más, la gran protagonista del enlace, con el vestido que diseñó para ella Sarah Burton, sucesora de Alexander McQueen, la hermana de Catherine, volvió a recoger cientos de flashes a sus paso. A la doble de Pippa tampoco le falló el traje en esta particular recreación, aunque sí las damas de honor, quienes estaban algo más creciditas que las verdaderas niñas del enlace.
La popular periodista estadounidense Meredith Vieira fue la encargada de imitar a la reina Isabel II, quien se presentó a las puertas de la abadía de Westminster con todas sus mascotas, con las que posó en todas y cada una de las fotografías.
Harry, por su parte, sufrió para esta recreación, un gran cambio de imagen, ya que a pesar de lucir su pelo pelirrojo, su tez era mucho más morena que la habitual. Pendiente en todo momento de Pippa, con la que se rumoreó en su día que había feeling, el príncipe no dejó de gastar bromas a todos los invitados, que acabaron posando de manera muy divertida en el balcón del palacio de Buckingham.
El momento más divertido fue la llegada de la princesa Beatriz y su hermana la princesa Eugenia, sin lugar a dudas, las más llamativas del enlace, y no por su indumentaria, que también, sino por sus tocados. El conjunto elegido por Eugenia causó auténtico furor, tanto que este acabó siendo subastado en internet por una buena causa.
Quien tampoco faltó a esta divertida cita fue Victoria Beckham, a quien acompañaba un David Beckham de cartón, pues les fue difícil encontrar a un doble del sex symbol. Victoria, quien acudió a la boda real embarazada de su hija Harper Seven no pasó desapercibida y subida en sus interminables tacones hizo su entrada en la abadía con su particular Beckham.
La gran ausente de la ceremonia fue la duquesa de Cornualles, quien parecía no haber sido invitada a este evento, en el que hubo una pequeña y macabra alusión a ella, ya que una de las invitadas llegó con “su cabeza” bajo el brazo.
La gran boda real fue recreada en Rockefeller Center de Nueva York, eso sí, después de haber sido sometidos a unas largas e interminables horas de maquillaje.
