Pocoyó es una de las últimas sensaciones entre los más pequeños de la casa. A partir del miércoles, también muchos papás estarán muy pendientes de cómo le van las cosas al pequeño vestido de azul. Y es que el éxito abrumador que ha cosechado entre los niños avala ahora un ambicioso proyecto empresarial de su creadora, la productora Zinkia. Del mismo modo que conquistó a los niños, Pocoyó quiere conquistar ahora el mercado bursátil.
La serie de dibujos animados ya dio su salto internacional: se emite en abierto en 24 países distintos y su página de descargas de internet en Youtube ha superado los 60 millones. Incluso, en los próximos meses Pocoyó aterrizará en China, convirtiéndose en la primera serie de su estilo que consigue entrar en el gran mercado chino en los últimos meses. Unas cifras que sitúan a la creación española como una de las empresas más boyantes del panorama actual.
La popular serie de dibujos nació de la mente de David Cantolla, Guillermo García y Luis Gallego. Según ha contado el primero, el nombre surgió de un despiste de una de sus hijas. La pequeña rezaba por las noches: “Jesusito de mi vida, eres niño pocoyó”, una ocurrencia que sirvió para bautizar al niño azul. Querían diseñar dibujos relacionados con los recuerdos de sus niños, y esa idea les ha valido el éxito internacional. Detrás del popular personaje, la voz de Lucía, una niña de tres años “un terremoto, pero maravillosa”, según ha contado Cantolla. Una mezcla perfecta que ha arrasado entre los más pequeños.
El salto internacional
Pocoyó ha dado el salto a otros países y una de sus claves ha sido el merchandising de la serie: el protagonista y sus amigos (el perro Loula, la elefanta Elly, el pájaro Pajaroto y el pato Pato) ya existen en forma de muñecos. Zinkia ha firmado contratos de fabricación y distribución de todos ellos con las empresas jugueteras Bandai y Mattel, que llevarán a toda la pandilla por Europa, Oriente Medio y Latinoamérica.
El presidente de Zinkia, su productora, José María Castillejo, ha repasado las características del triunfo de Pocoyó en una entrevista concedida a la agencia EFE, donde declaró que Pocoyó es “una flor que está empezando a abrirse”, ya que se está expandiendo a través de las plataformas audiovisuales de distintos continentes, aunque de momento sólo ha se ha explotado en términos de marca fundamentalmente en España, según recoge la agencia. Ante sí, la serie tiene un futuro “prometedor”, ya que Zinkia está cerrando un contrato con Univisión, el importante grupo de comunicación en español, que será la tercera plataforma con la que entra en EEUU, y que supondrá un aumento de público sustancial.
El contrato, según publica Efe, supone que la serie estará con más fuerza en un mercado “que es 10 veces superior al español” y llegará a países como México, cuyo ritmo de crecimiento “es más del doble que el español”, enfatizó Castillejo en la entrevista.
De esta forma, en los próximos meses más de 3.600 millones de personas, la mitad de la población mundial, “podrán verlo en abierto”. Castilleja precisó que si se tienen en cuenta sólo las familias con niños y televisión, “40 millones de hogares en el mundo podrán ver a Pocoyó todos los días”. Y más aún: el 24 de agosto saldrá a la venta el primer disco con las canciones de la serie, con las voces de Alaska y Edurne; y, en octubre Pocoyó contará con su propia comunidad online. En 2011 el famoso niño del gorrito azul llegará a la gran pantalla y ya se está trabajando en el videojuego de la serie, “Pocoyó Racing”, diseñado tanto para la consola Wii como para Nintendo DS.
Pocoyó es el punto fuerte de Zinkia. Supone el 90 por ciento de sus ingresos pero según la información remitida al supervisor bursátil, el horizonte cambiará en los próximos años, ya que la productora quiere lanzar otras cuatro series de animación.
Tal y como señalan en Zinkia, “Pocoyó, que originalmente nace como serie de televisión, a día de hoy representa mucho más que eso: una marca de entretenimiento con un concepto multiplataforma de carácter global.” Bajo el lema “Pocoyó, aprende riendo”, la curiosidad de su joven personaje, acompañado de sus inseparables amigos, Elly, Pato, Loula y Pajaroto, Pulpo, Pajarito, y Valentina entre otros generan multitud de historias en un mundo creado para él. La serie muestra “el descubrimiento que realiza un niño pequeño del mundo que le rodea. Trata de la curiosidad, la imaginación, la franqueza, el interés, la tolerancia, el respeto y el amor. En este sentido, se concibe como una serie que enseña a aprender riendo.”
