Este pequeño hotel de estilo pirenaico regentado por los hermanos Ciria, José María y Dionisio, es un confortable refugio de trato personalizado para esquiadores y amantes de la montaña. Completamente renovado en 2005, sus coquetas alcobas miran a la montaña y hacia el pueblo de Benasque. Las hay para todos los gustos: dobles, con terraza, abuhardilladas, dúplex con salón, dúplex cuádruples y quíntuples, suites con bañera redonda de hidromasaje... Organizan para sus huéspedes todo tipo de paquetes con actividades muy dispares, desde el esquí hasta el heliesquí, los paseos con raquetas o la observación del canto del urogallo en temporada. El hotel dispone de guardaesquís y facilita transporte a la estación de Cerler. En el restaurante El Fogaril, nombre que recibe por la cúpula de piedra, granito y madera envejecida que se encuentra en la entrada del comedor, se sirven platos de la cocina altoaragonesa de nivel, tradicional pero adaptada a los tiempos actuales. Especial atención merecen los desayunos, a base de fiambres, pan con tomate y zumo de naranja natural.

Instalaciones:

Recepción, salón de estar, guardaesquís, aparcamiento y garaje

Alrededores:

Estación de esquí de Cerler (5 kms.), Aneto y Valle de Estós