Colección de planes para una escapada de fin de semana en Andorra

Una mañana de románico y museos, una tarde de shopping, un viaje acrobático, actividades en familia o momentos de relax. Propuestas para desgranar en unos días lo que esconde este diminuto país de los Pirineos.

by hola.com

UNA MAÑANA DE ROMÁNICO Y MUSEOS
Andorra es el país con mayor concentración de iglesias románicas por metro cuadrado, y además medio centenar están en un excelente estado de conservación, de las que algunas muestran maravillosos restos de pinturas murales policromadas. Para los que busquen arte, lo mejor será empezar el recorrido en el Centro de Interpretación Andorra Románica, un museo interactivo que ayuda a entender sus particularidades. Después, en el Bus Turístico, hay que acercarse a conocer algunas de estas joyas de los siglos XI-XII más significativas, como la de Sant Joan de Caselles o San Cristòfol D’Anyòs. En Canillo espera el santuario de Meritxell, otro de los icones del país dedicado a su patrona; y por todo el país un puñado de interesantes museos: el Centro de Interpretación del Agua y del Madriu; el d’Art d’Escaldes-Engordany; el Museu de la Miniatura, el del Perfum, el del Cómic, el Museu del Tabaco, el de la Moto…, a los que se puede acceder con el Pasaporte de los Museos por 10-19 €. Otra idea es seguir una ruta temática, como las del Hierro o el Hábitat Rural.

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UN TARDE DE SHOPPING
Es difícil que alguien que vaya a Andorra se resista a dedicar un tiempo a deambular ante los escaparates de las tiendas de sus principales localidades, y es que aquí los productos están exentos de impuestos. Dos referencias imprescindibles a la hora de salir en busca de moda y complementos, perfumería, música o gadgets son las avenidas de Meritxell, en Andorra la Vella, y en Escaldes-Engordany, la de Carlemany, con sus establecimientos abiertos todos los días desde la mañana a la noche. Tras las últimas compras, nada como alargar la jornada hasta altas horas de la madrugada en los locales más concurridos. En la capital, una referencia es la discoteca Festa Andorra. Más tranquilos, La Fada Ignorant y el Cisco de Sans, en el centro.

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DEL MUSHING A TREPAR POR LOS ÁRBOLES
Para el invierno, por supuesto, pero también Andorra es para la primavera y el verano. En la estación de Vallnord, por ejemplo, se puede practicar en familia el mushing (una especie de trineo adaptado con ruedas) y en el Family Park de Canillo, en la estación de Grandvalira, descubrir la fauna y la flora del lugar con juegos pedagógicos. Otro de los lugares de visita obligada para unas vacaciones con niños es Naturlandia, en Sant Julià de Lòria, donde los pequeños pueden iniciarse en el tiro con arco, el golf, conocer el Parque de Animales o bajar por el Tobotronc, una de las atracciones más populares y divertidas de Andorra, que con sus 5,3 kms de longitud y 400 m. de desnivel hacen de él el tobogán alpino más largo del mundo. También de visita obligada es el Bosque de Segudet, en Ordino y el Bosque de Aventuras de Engolasters, cuyo recorrido discurre por un divertido circuito instalado en las copas de los árboles y desde los cuales se divisan unas fantásticas panorámicas del país. Para los que quieran emular a un piloto de Fórmula 1, el Karting Marc Gené permite descargar adrenalina.

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UN VIAJE ACROBÁTICO
Son ya dos años lo que lleva el Cirque du Soleil inspirándose en Andorra para montar un original espectáculo del que se puede disfrutar cada verano en este pequeño país de los Pirineos. Y este será el tercero. Después de la naturaleza y las estaciones del año, ahora las leyendas andorranas han animado a esta prestigiosa compañía canadiense a crear un mágico viaje acrobático y metafórico con el legendario héroe Carlomagno como protagonista. El evento tendrá lugar al aire libre y habrá 2.500 plazas con asiento de pago (a un precio de 15 €) y otras tantas de pie gratuitas. Habrá cinco funciones semanales durante cuatro semanas y el escenario estará situado en Andorra la Vella.

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PURO RELAX
Para acabar la escapada en Andorra nada mejor que despedirse con una cura de bienestar en Inúu, uno de los espacios termales más exclusivos del país. Porque el relax no entiende de tiempo, aquí se puede pasar media hora o una jornada entera disfrutando de forma individual o en pareja, porque así está enfocado. Un asesor termal acompaña al cliente por un recorrido variado en el que entran en juego tratamientos estéticos, de equilibrio mente-cuerpo, servicios de nutrición o experiencias sensoriales. Hay múltiples técnicas para escoger: la técnica ayurveda, el shiatsu japonés, el masaje thai... todas personalizadas en un edificio de 12.400 m2 con un la tecnología más avanzada, un private wellness e innovadoras áreas intimistas. Anexo a él está Caldea, perfecto para los que hagan la escapada en familia, por algo es el centro termolúdico más grande del sur de Europa. Dos oasis para cuidar cuerpo y mente y volver nuevo a casa.

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