Una escapada gastronómica a Flandes

Ni a ver monumentos, ni de shopping, ni a la última exposición de moda. La próxima excusa para viajar a esta región belga es la gastronomía. Del 19 al 25 de noviembre se celebra en Bruselas la Semana del Chocolate. Chocolate, gofres, cerveza…Cuando se trata de comer, los flamencos son un auténticos gourmet.

by hola.com

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Cuando el chocolatero Dominique Persoone llegó con su máquina de esnifar chocolate a la fiesta de cumpleaños que las mujeres de Ron Wood y Charlie Watts, guitarrista y batería de los Rolling Stones, les prepararon en Bruselas nadie lo podía creer: ¿Una máquina no de fabricar sino de esnifar chocolate? Fue realmente una sorpresa. Hoy, la máquina se comercializa en The Chocolate Line, una de las chocolaterías artesanales más afamadas de Flandes, con tiendas en Brujas y Amberes, donde irremediablemente hay que hacer parada; primero, para admirar la máquina, pero también para ver cómo se elaboran sus bombones y, sobre todo, para comprar y degustar los que pasan por ser uno de los mejores chocolates de Europa.

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No solo las chocolaterías, las calles de Flandes huelen a chocolate. Y es que el chocolate es a Bélgica lo que Tintín es a Milú: inseparables. Así que se le rinde pleitesia siempre que se puede. En noviembre, con la Semana del Chocolate. Este año será del 19 al 25 y durante esos días habrá numerosas actividades en torno a la más dulce de las delicatessen belgas: visitas a talleres de artesanos, degustaciones, conferencias...

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Pero esta Semana dedicada al arte chocolatero es solo uno de los actos que forman parte de Brusselicious, el año temático que este 2012 Bruselas dedica a la gastronomía y que, hasta diciembre, ofrece un montón de propuestas y atracciones por todos los rincones de la ciudad para deleitarse con los sabores de Flandes. Menús temáticos, itinerarios con sabor, obras de arte dedicadas a la gastronomía creadas por artistas europeos en las calles de Bruselas, un vagón de tren reconvertido en restaurante, talleres donde aprender a maridar cervezas o a fabricar chocolate

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Visto lo visto, está claro que no solo en España, en Flandes también se come bien. Su gran número de estrellas Michelin lo evidencian. Los flamencos son unos gourmets y comer es el pasatiempo nacional. Así que lo mejor será imitarlos. Para empezar, a la hora de entrar en un restaurante. Dado que su gastronomía combina la exquisitez de la comida francesa con la abundancia de la alemana, será mejor pedir un solo plato y, de postre, un café expresso, que hasta en los restaurantes menos glamorosos, se sirve acompañado de unas galletitas y varios tipos de azúcar. Después, a media tarde, habrá que probar alguno de los famosos dulces belgas: crêpes, tartas de todo tipo, gofres…

Entre las delicias más típicas de la cocina belga, hay donde elegir: el waterzooi, un finísimo guiso caldoso de verdura y pollo o pescado; los mejillones con patatas fritas; el stoofvlees, un guiso de carne de buey a base de cerveza; las croquetas de quisquillas, el konijn met pruimen (conejo con ciruelas), los espárragos a la flamenca, las hespenrolletjes (endivias envueltas en jamón dulces), los tomates rellenos y una gran selección de exquisitos quesos que nada tienen que envidiarle a los franceses: Passendale, Postel, Wynendale, Loo, Oud-Brugge…

Y, por supuesto, para acompañar estos platos, cerveza, la bebida belga por excelencia, ¡hay más de 450 variedades para elegir! Tanto si es blanca, roja, marrón, ámbar o dorado intenso, no hay que salir de Flandes sin haber probado, por lo menos, la cerveza típica del lugar: la Bolleke De Koninck en Amberes, la Brugs tarwe de Brujas, la Geuze o la Kriek de Bruselas, la Kwak de Gante, la Stella Artois de Lovaina y la Gouden Carolus de Malinas. La ginebra flamenca también es una sorpresa. Y las hay de mil sabores: natural, grosella, limón, manzana, café, crema catalana… El curioso local ‘t Dreupelkot de Gante es un lugar recomendable para probarlas todas.

Antes de coger el avión de vuelta, no te olvides de comprar los famosos pralines belgas en el aeropuerto, el mayor punto de venta de chocolate del mundo. Los hay de todos los sabores, formas y, cómo no, precios. Será la mejor forma de quedar bien con los que se quedaron en casa.

Más información
Turismo de Bélgica: Flandes y Bruselas

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Solo tendrás que responder a una pregunta cuya respuesta la encontrarás en algunos de los reportajes que sobre este destino saldrán publicados desde hoy y hasta mediados de octubre en www.hola.com/viajes o en www.flandes.net/concursobruselas.

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