Culto al cuerpo y al espíritu en un hotel de yoga

¿Tienes pensado realizar una escapada para descansar de verdad y recargar las pilas? Pues nada como hacerlo en uno de estos retiros situados en los lugares más bellos del mundo. Meditación, relax, masaje, cuerpo, mente, espíritu, cocina biológica… empieza ya a familiarizarte con el lenguaje que en ellos impera.

by hola.com

VER GALERÍA

Si eres de las que practican el yoga seguro que tú también piensas que su práctica genera una especie de adicción. Que no es sólo es una especie de gimnasia que aumenta la flexibilidad, también forma parte de un estilo de vida que tiende a mantener el equilibrio entre cuerpo, mente y espíritu. Seas o no experta, te presentamos un puñado de hoteles de yoga repartidos por todo el planeta donde conseguir una relajación total. Las sesiones diarias de esta disciplina, su cocina sana, sobre todo vegetariana, y un entorno y una naturaleza de increíble belleza –donde los yoghis perciben la auténtica inspiración, son todos los ingredientes que necesitas para renovar energías y olvidarte del estrés cotidiano. ¿A qué estás esperando?

Golden Buddha Beach Resort (Khon Phra Thong, Tailandia) (http://www.goldenbuddharesort.com/)
A un par de horas al norte de Phuket, lo bastante lejos como para sentirse aislado del mundo, y entre arrozales y espesos bosques surge este refugio que parece diseñado para practicar un yoga dinámico en la playa. Desde las amplias terrazas de las casitas de madera destinadas a los huéspedes se contemplan las escarpadas rocas del mar turquesa de Andaman. El paseo por la playa parece no tener fin, son 16 kilómetros de arena blanca, donde además de pasear puedes observar el desove de tortugas en peligro de extinción. Un plan casi tan sugerente como abandonarse a un masaje tailandés.

Kripalu Center (Stockbridge, Estados Unidos) (http://www.kripalu.org/)
En una idílica pradera de los Berkshires los jesuítas construyeron a mediados del siglo XX este complejo donde reina el silencio y cuyo nombre significa misericordioso. No todos los que lo intentan pueden participar en los numerosos talleres que propone este centro de yoga y salud (hatha, ashtanga, sivananda, iyengar, anusara, vinyasa, kripalu), porque aquí todas las solicitudes pasan un estricto control que no te asegura la estancia. Hay un dormitorio comunitario y habitaciones individuales y dobles y proponen más de una treintena de terapias sanadoras y una cocina ecológica integral de tipo regional.

Haramara Retreat (Nayarit, Mexico) (http://www.haramararetreat.com/)
Entre el océano Pacífico y las montañas de la Sierra Madre, y junto a una paradísiaca playa, este alojamiento es un idílico y exclusivo refugio para personas en busca de relajación y crecimiento personal. Un santuario para el alma en mitad de la selva y a 40 minutos del aeropuerto de Puerto Vallarta. Las sesiones de yoga en el pabellón abierto que corona la colina son toda una experiencia, como también los masajes de primera categoría que se brindan a los huéspedes, la posibilidad de una meditación vepassiana, el lujo de una siesta tradicional, la comodidad de dormir en uno de sus románticos bungalows que miran al mar, el disfrute de su gastronomía vedana o, incluso, el privilegio de avistar ballenas desde esta privilegiada atalaya.

Amansala (Tulum, México) (http://www.amansala.com/)
A dos horas al sur de Cancún y al borde del mar, este establecimiento cuyo nombre viene a significar “agua tranquila” brinda todo tipo de opciones a sus huéspedes. El día puede comenzar en la playa con una vigorosa caminata, seguir con una sesión de pilates y terminar con el yoga y la meditación. Y en medio hacer excursiones a la selva cercana en kayak, bucear en los cenotes, visitas las ruinas mayas, recibir un masaje en la dorada arena o, simplemente, pasar el día en las encantadoras cabañas de madera, de elegante ambiente hippie, tomando uno de los mejores margaritas del mundo.

Canal Om (Los Vilos, Chile) (http://www.canalom.com/)
El espectacular entorno en el que se ubica este oasis de paz no puede ser más idílico, uno incluso puede llegar que ha llegado al fin del mundo. A espaldas quedan milenarios glaciares, el altiplano chileno con su desierto, vertiginosos barrancos, cactus y, en frente, el océano Pacífico. Es un lugar pensado para contactar con uno mismo, con la naturaleza y el silencio, para alimentarse sanamente con los productos del propio huerto orgánico, para beber un excelente vino chileno, para hacer yoga de primer nivel y disfrutar de diversas terapias…

Parrot Cay (Turks & Caicos, Caribe) (http://www.comohotels.com/parrotcay)
Está situado en una isla privada dentro del archipiélago de Turks & Caicos con una larguísima playa de arena dorada y agua azul turquesa donde el reloj parece detenido y el cambio de estación sólo lo marca el paso de las ballenas. Un entorno de súplica para dejar atrás la monotonía diaria y experimentar el más profundo bienestar en este lujoso y natural santuario perdido del Caribe. A su excelente ambiente para meditar y ejercer la contemplación se suma su oferta de terapias orientales.


Síguenos en @HolaViajes y en Facebook

Más sobre: