La estricta y finísima dieta de los corgis de la reina Isabel II, ¡te sorprenderás!

La raza de perros Corgi han acompañado a la Reina Isabel II a lo largo de su vida. Sus amadas mascotas han estado con ella en los momentos más importantes desde que era una niña. Al ser la ‘compañía real’ de la monarca, los perritos han llevado una vida más lujosa de lo que muchos podrían imaginar. En varias ocasiones, la monarca se ha referido a ellos como su familia y por ello se asegura de que sus fieles compañeros sean tratados igual que cualquier miembro de la estirpe real.

VER GALERÍA  La Reina tiene un lazo muy especial con la raza corgi. Foto: Getty Images

¿Qué es lo que comen los perritos más consentidos de toda Gran Bretaña? En entrevista con HELLO! Online, el chef Darren McGrady, quien trabajó por 11 años al servicio de la Reina, contó que los corgis llevan una dieta muy estricta. “Cuando trabajé para el palacio, teníamos un menú diseñado para los perros”, contó Darren al portal. “Una vez que (el menú) estaba listo y aprobado,  la señorita Fennick –quien cuidaba de ellos- nos lo enviaba a la cocina para que nos encargáramos de la comida en Sandringham”.

VER GALERÍA  Los corgis la han acompañado a lo largo de toda su vida y los considera como de su familia. Foto: Getty Images

“En el menú venía enlistado que es lo que comerían. Un día sería res, al otro día pollo, al siguiente cordero, y al otro día conejo y alternábamos sus comidas en esos días”. Las carnes eran picadas finamente en trozos pequeños,  de manera que los perros no tuvieron problemas al devorarlos. McGrady añadió que los perros comían del conejo que el príncipe William y el príncipe Harry solían cazar en Windsor.

La rutina de la comida de los corgis era estricta. “Todos los días uno de los sirvientes de la Reina bajaba a la cocina, cerca de las dos o tres de la tarde, y tomaba los platos de la comida y los llevaba arriba para alimentarlos. Cada uno tenía su propio plato y la Reina los alimentaba personalmente, creo después de haber tomado su té”.

VER GALERÍA  Aunque es una de las mujeres más poderosas del mundo, ella se encarga de alimentar a sus mascotas. Foto: Getty Images

El primer corgi que recibió fue a la edad de 18 años y lo nombró Susan. Era tanto el cariño que sentía por la perrita, que la llevó a su luna de miel con el príncipe Felipe. Siendo una niña, creció rodeada de perros de esa raza.  Holly, una de las descendientes de Susan, murió  hace pocos días. De esta manera, Isabel II se queda únicamente con el corgi Willow y con dos dorgis (una cruza entre un dachshund y corgi), Candy y Vulcan.  

VER GALERÍA Sus perritos viajan con ella cuando va de vacaciones a Balmoral. Foto: Getty Images

La Reina nunca está lejos de sus perros. Recientemente fueron fotografiados en el cumpleaños número 90 de Su Majestad y también fueron protagonistas del divertido sketch de los Juegos Olímpicos de 2012, donde aparece Daniel Craig en su personaje de James Bond. Aunque se ven súper tiernos, Darren admitió que los animalitos son temperamentales: “¡Los cocineros no querían a los corgis! Son escandalosos, ladraban mucho. Siempre peleaban con los perros de la Reina Madre o con los de la Princesa Ana”. En tono de broma, comentó: “En lugares como Sandringham, los perros entraban a la cocina y algunas veces pensábamos: ‘Fuera de aquí, sino te meteré al horno’”.

Uno de los momentos que le causaban más estrés era cuando viajaban a Balmoral. “Todos teníamos que usar nuestros trajes, porque viajábamos con la Reina y ella llevaba consigo a sus perros. Las mascotas se recostaban en nuestros pies y dejaban pelos por todos lados. Sin intentabas echarlos, te ladraban”.  

A pesar de todo, Darren tenía a su consentido, Chipper, un dorgi: “Él era mi favorito, así que cuando estábamos en Sandringham siempre le daba golosinas en la cocina”. El chef asegura que poseía una gran personalidad: “Creo que el hecho de tuviera un poco de la raza daschund hacía que fuera más tranquilo y más dulce. También me gustaban Myth y Piper, ella era un dorgi de pelo largo. Pero de los otros no me acuerdo muy bien. Honestamente, para mí todos se veían igual”.