Si quieres cuidar la línea en Navidad, ¡ojo con las bebidas!

No sólo determinados alimentos pueden afectar a nuestro peso

Por hola.com

Época de grandes comilonas y, en paralelo, época de pequeños o grandes disgustos para la báscula. En Navidad es complicado no ceder a las tentaciones en la mesa, y quien más quien menos comente algún exceso. Si estás intentando mantener la línea, tal vez tienes muy claro qué es lo que debes intentar evitar en estas fechas en lo que a comida se refiere, pero ¿has pensado en las bebidas? Tal vez no hayas tenido en cuenta las conocidas como “calorías ocultas”. Es decir, alimentos aparentemente inofensivos que esconden tras ellos un valor energético muy elevado. “Las bebidas son las grandes olvidadas en la dieta de los españoles. De nada sirve pedir una ensalada y un filete de pescado a la plancha si regamos la comida con bebidas alcohólicas o refrescos azucarados en exceso”, explica Laura Labernia, responsable de la Unidad de Nutrición y Dietética de Clínica Opción Médica. “Tan importante es seleccionar bien los alimentos como decidir con quévamos a acompañarlos”, sentencia la especialista.

Los refrescos con azúcares añadidos y las bebidas con alcohol significan calorías directas para el organismo y no le aportan ningún beneficio a nivel nutricional, por eso cuando los nutricionistas se refieren a ellas hablan de “calorías vacías”. “Cada gramo de alcohol contiene alrededor de 7 Kcal, un porcentaje substancialmente más elevado que el de los hidratos de carbono o las proteínas (4Kcal). Además, la ingesta de alcohol inhibe la absorción de algunas vitaminas y minerales, pues el hígado lo metaboliza rápidamente y lo utiliza para cubrir las necesidades energéticas del momento, en detrimento de los carbohidratos o grasas que estaban destinados a tal fin”, razona Laura Labernia.

Ten en cuenta
- No hay dudas: el agua es la bebida más saludable. Calma la sed, nos refresca y está libre de calorías. Si beber agua te parece aburrido, pídela con gas y una rodajita de limón.
- A mayor graduación más calorías. Por lo tanto, elige siempre las bebidas alcohólicas que contengan menor graduación como el vino, la cerveza o un vaso de sidra y sobretodo no te excedas, con una o dos copas es suficiente.
- Control con los refrescos azucarados. Una lata de 330ml contiene de media unas 140 Kcal y no aporta ningún tipo de nutriente a tu cuerpo. Si se te antoja algo dulce opta por su versión light, la mayoría tienen prácticamente solo 0 calorías y te servirán para calmar la ansiedad.
- El té y las infusiones son sin duda el mejor broche final a una cena. Una opción saludable y nada calórica que además ofrece múltiples beneficios a nuestro organismo.
- El café, mejor solo y si es con leche que sea descremada. Para endulzarlo, olvídate del azúcar y pide sacarina.
- No mezcles bebidas alcohólicas. Si te apetece una copa, adelante, pero trata de no mezclarla con zumos o refrescos que duplicarían su valor calórico.
- Evita las bebidas energéticas. Contienen un elevado número de calorías y otros componentes que no beneficiarán en nada a tu figura.
- El zumo, mejor si es natural. Los zumos que encontramos en las estanterías del supermercado suelen contener una elevada cantidad de conservantes, colorantes y azúcares añadidos, entre otros. Además, en el proceso de fabricación, las frutas pierden algunas de sus cualidades.