La Familia Real sueca está viviendo unos días prenavideños de lo más agitados. Si este lunes era la princesa Magdalena la que acudía a la recepción de abetos, acompañada por toda su familia, horas más tarde eran los Reyes y la heredera los que participaban en la reunión solemne de la Academia Sueca en la Bolsa de Estocolmo. La cita tuvo una notable ausencia, la del príncipe Daniel, marido de la Princesa, que no pudo participar por tener un ligero resfriado, según se informó desde la Casa Real. 

Para esta cita Victoria de Suecia eligió un vestido de terciopelo en color verde botella de manga larga y escote redondo de Camilla Thulin. Llevó un moño bajo lateral, uno de sus peinados favoritos para las grandes citas, y un fastuoso broche de diamantes con una gran esmeralda central con el que sujetaba su banda

Siempre elegante, Silvia de Suecia llegó a la Bolsa con el Rey. Llevó para la ocasión un vestido negro y una capa al tono con ribetes de pelo. La Academia Sueca fue fundada en 1786 por Gustavo III con el fin de promover la lengua y la literatura suecas. Si en esta ocasión ha sido su yerno el que se ha tenido que ausentar, la semana pasada era la esposa del monarca la que tuvo que cancelar un viaje oficial a Dubái, con motivo de la Exposición Universal, al que finalmente solo acudió el soberano nórdico

Ha sido la gerente de comunicación de la Corte sueca, Margareta Thorgren, la que ha informado de la indisposición del príncipe Daniel y que ha hecho que Victoria de Suecia acudiera sola. Esta velada suele ser el último acto oficial de la Familia Real antes de la Navidad, aunque en otras ocasiones se ha visto a los miembros de los Bernadotte el día de Nochebuena en un concierto en el Palacio de Drottningholm

La sesión de la reunión de la Academia Sueca contó con la intervención de Ingrid Carlberg, escritora y periodista, y de Steve Sem-Sandberg, escritor y crítico. Desde el año 1901, esta institución también se encarga de las nominaciones de los premios Nobel de Literatura. El rey Carlos Gustavo es patrono de la entidad. El pasado 10 de diciembre, los Reyes y la Princesa, que en esa ocasión sí estuvo acompañada por su marido, presidieron unos Nobel marcados por la sobriedad y que se adaptó a los protocolos sanitarios para evitar repuntes de coronavirus, que están siendo especialmente virulentos en los países del norte de Europa

En Suecia no es obligatorio el uso de mascarillas en interiores, salvo en el transporte público,a pesar de que la sexta ola ya es una preocupación para el Gobierno. Se ha animado a las empresas a que sus empleados teletrabajen el mayor tiempo posible y los colegios han reducido el número de alumnos por clase

Hace tan solo unos días se conoció que la princesa Mary de Dinamarca había dado positivo en Covid-19 y se encontraba confianda. También Mette-Marit de Noruega canceló a última hora su presencia en los Nobel de la Paz por un resfriado. A la a esposa del príncipe Haakon se le diagnosticó en 2018 fibrosis pulmonar, una enfermedad respiratoria con patrón restrictivo en el que el tejido de los pulmones se endurece y dificulta la respiración

Este año el número de asistentes a la reunión navideña se ha reducido considerablemente por las medidas sanitarias. La etiqueta para la velada incluye traje largo para las damas y frac para los caballeros. La Familia Real se coloca en una tribuna y en el medio del salón se sitúa la mesa de reuniones con 18 sillas doradas, numeradas y tapizadas en seda azul. Los bancos del pasillo tienen público, todos vestidos según el protocolo marcado. En esta noche tan especial para las letras suecas también acuden altos mandatarios y destacados representantes de la vida cultural del país

Justo antes de que la ceremonia comience, la Familia Real hace su entrada. El programa de la reunión sigue básicamente el mismo patrón de un año a otro, con pequeñas variaciones. Las únicas alteraciones que se producen es cuando se elige a un nuevo miembro que realiza un discurso de admisión y cuando se concede el gran premio de la Academia