Poco queda de la chica de ayer: de la exmodelo y antigua concursante en un reality show que fue. Sofia Hellqvist ha experimentado una profunda transformación desde que hace cinco años los tabloides suecos revelaran que mantenía una relación con Carlos Felipe de Suecia y ya mismo todos pueden ver en ella la Princesa que será cuando dé el sí a su Príncipe el próximo 13 de junio en la iglesia del Palacio Real de Estocolmo.
Aunque el compromiso fue anunciado oficialmente en junio del año pasado, la Casa Real sueca ya había iniciado tiempo atrás su formación principesca, una vez que el príncipe Carlos dejó claro que era la elegida y que los Reyes y el resto de la Familia Real sueca aprendieron a conocerla. El proceso de cambio de imagen y de adaptación al futuro papel de Princesa de Suecia comenzó ya en 2011, cuando se mudaron a vivir juntos al elegante barrio de Djurgården, en Estocolmo. Fue entonces cuando se mantuvieron las primeras conversaciones con miembros de la Corte Real sueca para ir preparando a Sofia para su destino real.
Barbro Ehnbom y Alice Trolle-Wachtmeister, principales asesoras
No ha trascendido si hay alguien en concreto que ejerza el papel de mentor, como ocurrió por ejemplo con el príncipe Daniel, que fue tutelado por Jan-Eric Warren, general de brigada y maestro de ceremonias de la Casa Real, quien lo instruyó en cuestiones como historia de Suecia y de la familia real, ciencias políticas o detalles sobre el funcionamiento de palacio.
Los medios de comunicación suecos apuntan como uno de los principales asesores de Sofia a la empresaria sueca Barbro Ehnbom, asentada en Estados Unidos y fundadora de Barbros Best and Brightest, una red de contactos suecos e internacionales. Ehnbom conoció a Sofia en Nueva York hace unos años y la introdujo en su red. Otra de las personas clave es Alice Trolle-Wachtmeister, dama de compañía de la Casa Real y que en su momento ayudó a Silvia Sommerlath antes de convertirse en princesa y luego en reina; además de otras figuras más cercanas como la propia Reina, la princesa Victoria y la princesa Christina, hermana del rey Carlos XVI Gustavo.
Cambio de imagen: un giro hacia lo clásico
La transformación de Sofia también ha afectado a su imagen, una metamorfosis para la que ha contado con una estilista, la experta en moda sueca Camilla Åstrand. Así ha ido abandonando el estilo informal y algo provocativo por otro más clásico, a la vez que ha cambiado el flequillo por un peinado más formal, ha dejado de ir al solarium o se ha quitado el piercing que tenía en el ombligo. Un punto destacado en su cambio de imagen ha sido la eliminación del tatuaje en forma de flor serpenteante que llevaba en su brazo derecho. Según la revista Hänt Extra fue una condición sine qua non, que los Reyes suecos dejaron bien clara la primera vez que su hijo les presentó a Sofia. Aunque Åstrand es su estilista habitual, recurre a otras de forma ocasional. Así, antes del anuncio de su compromiso de boda, echó mano de Tina Törnqvist, ayudante de cámara de la princesa Victoria.
La creciente agenda oficial de Sofia
La introducción de Sofia en los actos oficiales o las celebraciones familiares ha sido progresiva. En la boda de la princesa Magdalena en junio de 2013 apareció sentada en la iglesia sólo unas filas detrás de la Familia Real sueca, y también fue invitada al bautizo de la princesa Estelle, gestos de una gran carga simbólica y que mostraban su aceptación casi definitiva. Tras el anuncio de compromiso, su primer acto oficial fue la cena de representación anual de los Reyes en palacio en noviembre pasado. Su presencia junto al resto de la Familia Real en la ceremonia de entrega de los Nobel y la posterior cena de gala, considerada el acto social más importante en Suecia, fue otro paso importante.
La solidaridad de una Princesa
Asesorada por la Casa Real, Sofia ha ido también adoptando otro perfil público. Desde 2010 ha estado comprometida con Playground, una iniciativa para impulsar proyectos para ayudar a niños marginados en Sudáfrica, un trabajo que inició con su amiga Frida Vesterberg y en el que se ha volcado en los últimos tiempos, además de arrastrar con ella a su prometido. Sofia protagonizó incluso un documental sobre sus proyectos benéficos con la televisión pública sueca SVT, y se da por supuesto que cuando se convierta en Princesa seguirá vinculada a esta y a otras iniciativas relacionadas por ejemplo con mujeres maltratadas o el SIDA, temas que nadie representa en la Familia Real.
Segura ante las críticas
La nueva Sofia ha mostrado, no obstante, personalidad para no renegar de su pasado, incluso de los aspectos más polémicos. "Se ha escrito mucho durante años, no sólo tras el compromiso. Para mí es bastante aburrido, pasó hace diez años, he seguido con mi vida. Pero no me arrepiento, todas las experiencias construyen a una persona, aunque ahora no lo haría si me preguntaran", dijo en un reciente documental con la SVT, mientras sentado a su lado estaba el príncipe Carlos Felipe.
Frente a las críticas o las dudas sobre su idoneidad, que han ido desapareciendo progresivamente hasta quedar enterradas y convertirse en una de las favoritas de los medios de comunicación suecos, Sofia también se ha mostrado segura de lo que le espera: "Llevo muchos años con la familia, conozco esa vida y sé lo que va a cambiar. Me siento lista, no habrá sorpresas, creo que va a salir bien”. Ya vislumbramos a la Princesa de Suecia.
-La transformación en imágenes de Sofia Hellqvist en Princesa de Suecia
