Estefanía de Mónaco reapareció el pasado fin de semana en la vida social del principado para cumplir con la que ha sido su causa principal desde hace dos décadas: la gala solidaria para la lucha contra el SIDA. La Princesa hizo su aparición en el Sporting Club de Montecarlo acompañada de sus tres hijos. El mayor, Louis Ducruet, acudió con su mujer, Marie; y la pequeña, Camille Gottlieb, estuvo acompañada por un amigo que no posó en las fotos oficiales. Sin embargo, fue Pauline Ducruet la que se convirtió en la protagonista de la noche al posar, junto a su novio, el empresario Maxime Giaccardi, haciendo unos gestos que han disparado en las últimas horas los rumores en torno a un posible embarazo.