Han pasado casi dos meses desde que Paulina Ducruet se instalara en Nueva York, sumándose así a la larga lista de miembros de la realeza europea que hacen de la "ciudad que nunca duerme" su palacio particular. Sin embargo, se acercan unas fechas muy especiales para la familia Grimaldi, la primera de ellas es el bautizo de los príncipes Jacques y Gabriella. ¿Abandonará la hija de la princesa Estefanía la Gran Manzana para estar presente en la gran cita monegasca?
Sus compromisos como imagen de una firma cosmética para el mercado asiático, ya llevaron a Paulina a perderse el pasado 7 de enero la presentación oficial del Heredero y de su hermana la condesa de Carladés. Los mellizos de Mónaco volverán a ser los protagonistas el domingo 10 de mayo cuando serán bautizados en la Catedral de San Nicolás, en el Principado.
El Palacio ha anunciado que en las celebraciones estarán presentes miembros de la Familia Real monegasca, sin embargo no han especificado quién asistirá. Lo cierto es que Paulina Ducruet vive a kilómetros de allí, instalada en Manhattan, volcada en sus estudios de moda y disfrutando al máximo de los placeres que ofrece la ciudad.
El pasado fin de semana ha sido inolvidable para ella, ha celebrado su 21 cumpleaños en Nueva York y lo ha hecho por todo lo alto. En plena primavera, cuando la ciudad luce más bonita, según el diario Svenskdam recibió la visita de sus hermanos, Louis y Camille, y de su madre la princesa Estefanía, que ya la había vistado con anterioridad. La familia disfrutó de un día al más puro estilo neoyorquino comenzando con un picnic en Central Park y terminando en la gala del MET.
Aprovechando que su aniversario coincidía con la gala del Costume Institute en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, Paulina se acercó hasta el lugar y compartió su visita en las redes sociales. Una imagen pisando la alfombra roja -desde donde juró (de forma literal) tener a Amal Clooney a sus espaldas- y un vídeo en el que se podía ver la explosiva actuación de Rihanna con el público bailando, en el que afirmaba estar viviendo el mejor cumpleaños de su vida.
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Aunque la visita de su familia habrá supuesto una gran alegría para la hija de Estefanía de Mónaco, lo cierto es que ella tiene un gran apoyo en la ciudad. Su prima Jazmin Grace Grimaldi –hija de su tío, el príncipe Alberto- le recibió con los brazos abiertos a su llegada a Nueva York y ejerció de perfecta anfitriona, yendo con ella algunos eventos de lo más exclusivos.
Todo apunta a que habrá que esperar a la mañana del próximo domingo para descubrir si Paulina Ducruet ha regresado al Principado para esta cita histórica y familiar, que todos los monegascos esperan con entusiasmo, pues no ven a los bebés desde su presentación. Lo cierto es que en los próximos meses la familia Grimaldi tiene planeadas muchas celebraciones: las bodas -civil y religiosa- de Pierre Casiraghi y Beatrice Borromeo y los diez años de reinado de Alberto II. ¿Encajarán estas citas en su agenda neoyorquina?
