Con una cena privada y en familia celebraron la reina Isabel II y el Duque de Edimburgo su 70º aniversario de boda. Una ocasión tremendamente especial en la que se rodearon de sus seres queridos en el palacio de Windsor para brindar por su amor, una velada a la que asistieron, se les vio llegar en coche, los Duques de Cambridge y el príncipe Harry. A pesar de que algunos rumores situaban a Meghan Markle en la capital británica no se la vio en el coche con el hijo del príncipe Carlos, que acompañó a su hermano y su cuñada a la fiesta.
Para la ocasión, la duquesa Catherine, que está embarazada de su tercer hijo, hizo un cariñoso guiño a la abuela de su marido. Y es que lució en el cuello un collar de perlas de cuatro vueltas con un broche de diamantes en la parte delantera que pertenece a la reina Isabel. Se ha podido ver a la reina Isabel llevando esta joya en varias ocasiones, una de ellas en 1983 durante una visita a Bangladesh, y también en su día Diana de Gales lo tomó prestado y lo lució en un banquete en Hampton Court Palace en 1982. No es la primera vez que la Reina le deja algunas joyas a Catherine, síntoma del gran cariño y aprecio que profesa a la mujer de su nieto.
Lo hizo prestándole el majestuoso brazalete de diamantes, conocido como la pulsera de cuatro hojas, en la Cena de Gala del Centro Ann Freud, una pieza muy estimada, que había pertenecido a la Reina Madre y a raíz de su muerte a la propia reina Isabel. Además por su boda, le cedió la tiara Halo de Cartier, que recibió de la Reina Madre por su 18º cumpleaños, para que coronara a la Duquesa en el día más importante de su vida, y por su primer banquete de Estado, le dejó su brazalete de boda, regalo del Duque de Edimburgo, con el que la soberana fue retratada en su Jubileo de Diamante.
El brillante gesto de la reina Isabel hacia la Duquesa de Cambridge
Abrimos el joyero real de la Duquesa de Cambridge
Aunque los detalles del vestido de la princesa Catherine no se apreciaban en su totalidad, se pudo ver que llevaba un traje negro con encaje, quizá el mismo que llevó en una gala hace solo unas semanas (en The Anna Freud Gala). El príncipe Guillermo y su hermano también iban de rigurosa etiqueta con traje y pajarita. Además del aniversario, seguro que la familia brindó también por la próxima paternidad de los Duques de Cambridge que con la llegada de su tercer bebé se convertirán en familia numerosa. Todo son buenas noticias en la Familia Real británica que quién sabe si pronto celebrará además el compromiso del príncipe Harry y Meghan Markle.
La fiesta contó además con la presencia del Duque de Kent, primo de la Reina; los hijos de esta, el príncipe Carlos y su mujer la Duquesa de Cornwall, el príncipe Andrés, el príncipe Eduardo y la princesa Ana. También parece que asistieron los nietos de Isabel II, Beatriz y Eugenia, Peter Phillips y Zara Tindall, que estuvo acompañada por su marido Mike Tindall.
La Monarca británica, de 91 años, y el duque de Edimburgo, de 96, contrajeron matrimonio en 1947, en la abadía de Westminster, una fecha que han marcado 70 años después con varias imágenes oficiales tomadas por el fotógrafo británico Matt Holyoak, considerado uno de los mejores retratistas de su generación.
