Que un bar que se llama Príncipe de Gales en el Reino Unido es bastante común, lo que no deja de ser insólito es que uno de ellos reciba por confusión una factura dirigida -a primera vista- al príncipe Carlos de Inglaterra. Esto es lo que le ha pasado a los dueños del pub en Broxted, una localidad cercana al aeropuerto londinense de Stansted.
Más de dos mil euros (1,773 libras esterlinas) es lo que la compañía de suministros energéticos British Gas reclamaba a los dueños de este establecimiento en una carta que comenzaba con un saludo dirigido a “Su Alteza Real el Príncipe de Gales”. Un título que ostenta el Heredero de la monarquía británica y que actualmente está en manos del príncipe Carlos de Inglaterra.
Así lo ha contado a la BBC, Terry Gaskin, el propietario del bar: “Fue todo un shock pero obviamente lo que ha ocurrido es una confusión”, relataba sorprendido a la cadena de televisión del Reino Unido. Aunque él declaraba no tener ni el gas, ni la electricidad contratada con esta compañía, la reclamación causó inquietud dado que en ella se advertía que “la deuda se había puesto en manos de una compañía de cobros”.
Evidentemente todo se trataba de un error de origen todavía desconocido, ya que ni al bar, ni al príncipe Carlos les pertenece esa deuda. “Su Alteza Real puede estar seguro de que él no es el destinatario de esa carta”, afirmó a la citada cadena un portavoz de la compañía energética que aclaró que todavía se está investigando cómo se produjo esa confusión. Una curiosa anécdota que no ha ido más allá y que los dueños de está típica taberna inglesa pueden contar a sus clientes.
