La duquesa de Cambridge se acuerda de su esposo en su primer discurso público: 'Lamento que Guillermo no pueda estar aquí

Con temple y ritmo pausado, voz clara y una sonrisa en el rostro Catherine pronunció un discurso que alababa la labor de la fundación benéfica Each

Por hola.com

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Había una gran expectación por escuchar el primer discurso de la duquesa de Cambridge en un acto oficial y el resultado no podía haberle sido más favorable. Catherine llegó con su eterna sonrisa y un vestido de la firma Reiss, que en 2010 llevó su madre para ir a las carreras de Ascot, al Hospicio Treehouse en Ipswich, para inaugurar sus nuevas instalaciones. Allí fue recibida por los miembros de la organización benéfica Each, que ofrece cuidado y apoyo a familias con menores que sufren enfermedades graves, y por un gran número de ciudadanos que no dejaban de ondear sus banderas.

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Ya en el interior del centro, la duquesa de Cambridge pronunció ante los miembros de esa organización de la que ella es patrona, unas breves palabras de elogio por su actividad. Con temple y ritmo pausado, voz clara y una sonrisa en el rostro la esposa del príncipe Guillermo pronunció un discurso hecho de frases cortas que llevaba escrito en un papel, que de vez en cuando consultaba. "En primer lugar, me gustaría daros las gracias a todos, no sólo por haberme aceptado como patrona, sino por haberme invitado hoy aquí", comenzó. "Solo lamento que Guillermo no pueda estar hoy aquí. A él le hubiera encantado", continuó. Este comentario provocó alguna sonrisa entre los asistentes que escuchaban embelesados a la futura princesa de Inglaterra.

"Para muchos, este es un hogar lejos de su verdadero hogar. Aquí se respira amor y esperanza y se ofrece una nueva oportunidad a todas aquellas familias que pensaban que no la tenían. Me siento orgullosa de formar parte de este hospicio y de poder ver el maravilloso trabajo que hacéis", concluyó. De esta manera, la duquesa superó sin problemas su primera prueba en la que debía hablar en público. Eso sí, Catherine confesó que se había puesto un poco nerviosa.

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Tras su intervención, la esposa del príncipe Guillermo recorrió las instalaciones del centro con los miembros de la organización. Durante el recorrido, Catherine pudo conversar con los residentes que estaban encantados con su visita. La duquesa escuchó la actuación de la pequeña Betania Woods, de 10 años de edad, y accedió a pintar con Marnie Jennings, una niña de tres años que no dudó en preguntarla nada más verla: "Hola princesa, ¿puedo pintar contigo?"

Desde que Guillermo viajó a Las Malvinas el pasado febrero para recibir instrucción militar, Catherine ha participado en numerosos actos oficiales en solitario, y se confirma como uno de los principales activos de la monarquía británica. Así, el pasado viernes demostró sus habilidades como jugadora de hockey sobre hierba, un deporte que practicó en su infancia, al participar en un entrenamiento con los equipos masculino y femenino que representarán al Reino Unido en los Juegos Olímpicos, y el sábado celebró el Día de San Patricio con una tradicional entrega de tréboles a los miembros de la Guardia Irlandesa en Aldershot, en el condado de Hampshire.