De sobra es conocido que como parte de la preparación que reciben los miembros de casa reales hay una profunda formación militar y que muchos de ellos son capaces de pilotar una gran variedad de aeronaves. Si Guillermo de Inglaterra optó por los mandos de un helicóptero de emergencias y su hermano Harry sobrevoló África en busca de cazadores furtivos, la elección de Guillermo de Holanda ha dejado a todos sorprendidos. ¡El Rey se pone a los mandos de un avión de pasajeros!
Ha sido el propio Monarca el que ha revelado durante una entrevista al medio holandés De Telegraaf esta afición desconocida hasta ahora que le lleva a pilotar aviones de pasajeros dos veces al mes desde hace más de veinte años. Teniendo las opciones de elegir alguno de los aviones que integran el Ejército del Aire de su país, el Rey –que es coronel de al Fuerza Aérea holandesa- opta por un avión de la principal compañía de los Países Bajos, la KLM, con base en el Aeropuerto de Schiphol, cerca de Ámsterdam.
“Siempre puedo decir que doy la bienvenida a los pasajeros en nombre del capitán y la tripulación, así no tengo que dar mi nombre", señaló el Rey -en una entrevista que ha tenido una gran repercusión a nivel nacional e internacional- en la que también afirmó que se ha dado el caso de que alguno de los pasajeros hay reconocido su voz en la megafonía del vuelo.
“Tienes un avión, unos pasajeros y una tripulación y eres responsable de ellos. No te puedes llevar tus problemas contigo, tienes que desconectar de todo y concentrarte en algo diferente” explicó Guillermo de Holanda para quien esta afición “es la mejor forma de relajarse”. El Rey acude a la cabina como un miembro más de la tripulación, vestido con el uniforme, algo que le ha ayudado a que este hobbie permanezca oculto durante tantos años. "Cuando camino por el aeropuerto con mi gorra de capitán , muy poca gente me reconoce", ha dicho durante la entrevista.
Hasta ahora el Rey ha pilotado un Fokker 70 y este verano tiene la intención de hacer un curso de Boeing 737, que le permitirá actualizarse y cubrir trayectos más lejanos. Una vez descubierto el “secreto” la propia compañía ha compartido en sus redes sociales varias imágens del Rey de Holanda en la cabina del piloto. A partir de ahora, los pasajeros se fijarán mucho más en la voz del piloto.
