Después de que don Juan Carlos y doña Sofía acudieran al Tanatorio de La Paz, en Tres Cantos (Madrid), para despedirse de la infanta Alicia de Borbón-Parma, tía del rey Juan Carlos, que falleció el pasado 28 de marzo a los 99 años, los reyes Felipe y Letizia se acercaron también hasta allí para darle su último adiós y mostrar su pésame a la familia. Vestidos de riguroso luto, los soberanos llegaron momentos antes de que comenzase la misa funeral y fueron recibidos por Inés y Teresa de Borbón-Dos Sicilias, hijas de la fallecida, con las que, tal y como reflejan las imágenes, don Felipe se mostró de lo más afectuoso, demostrando la buena relación que les une.
Junto a ellos se encontraban Ana de Orleans, viuda del infante don Carlos, con su hijo Pedro de Borbón Dos Sicilias, quien estuvo en todo momento acompañado de su mujer, Sofia Landaluce y Melgarejo. Horas antes, vimos llegando también al tanatorio a la infanta Elena junto a su hija, Victoria Federica, además de la infanta Pilar, que acudió con su hijo, Fernando Gómez Acebo.
Tras el funeral, tuvo lugar la incineración y días después sus cenizas serán trasladadas hasta el panteón familiar en su Austria natal. Dada su condición de Infanta podría haber sido enterrada en el Monasterio de El Escorial, como ocurrió con su hijo, Carlos de Borbón-Dos Sicilias (fallecido el 5 de octubre de 2015), pero ha renunciado a ello, pues quiere descansar en el país que la vio nacer el 13 de noviembre de 1917.
Doña Alicia se casó con el infante Alfonso de Borbón-Dos Sicilias, sobrino de Alfonso XIII y hermano de doña María de las Mercedes, condesa de Barcelona y madre del rey Juan Carlos. Era hija de Elías I, duque de Parma, y de la archiduquesa María Ana de Austria, que a su vez era sobrina de la reina María Cristina de España, esposa de Alfonso XII. Podría haberse convertido en Reina de España si Alfonso XIII y Victoria Eugenia, bisabuelos de Felipe VI, no hubieran tenido hijos.
