La infanta Cristina acompaña a sus hijos Miguel e Irene Urdangarín en su vuelta al cole

Los niños regresan a las aulas de su antiguo colegio en Barcelona

Por hola.com

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Los Duques de Palma y su familia recuperan día a día su antigua vida (con cambios) en Barcelona. Y, como solían antes de este paréntesis de tres años en Washington, los hijos de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín han vuelto a las aulas de su antiguo colegio en la Ciudad Condal.

Una nube de fotógrafos esperaba a las puertas del exclusivo centro escolar para inmortalizar la entrada de los pequeños Juan, Pablo, Miguel e Irene Urdangarín. Si bien ayer los niños acudieron en coche -el antiguo Volkswagen Golf verde de la hija menor de los Reyes con el que la familia Urdangarín-Borbón se mueve estos días- y accedieron al colegio por una puerta secundaria huyendo del acoso de los periodistas que les esperaban en la principal, hoy la infanta Cristina ha acompañado a pie a sus hijos menores, Miguel e Irene, en su vuelta al cole. La Infanta y los niños, con el semblante serio y ropa informal, formaban parte de la larga caravana de padres y alumnos que acudían esta mañana a la misma escuela.

 

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Se mudan de Pedralbes
Regresaron a la Ciudad Condal a principios de la semana pasada y ya hacen vida normal. Durante estos días, hemos visto tanto a la infanta Cristina como a Iñaki Urdangarín y sus hijos saliendo de su casa de Pedralbes en coche para hacer algunas compras, para disfrutar del deporte en el Real Club de Tenis de Barcelona, para reunirse con el abogado de Urdangarín, Mario Pascual Vives, o en el caso de la Infanta (Iñaki Urdangarín ha pedido una "excedencia temporal en Telefónica") para cumplir con sus compromisos profesionales como directora del Área Internacional de la Obra Social La Caixa.

Pero no todo es ni será igual tras su regreso de Washington, donde residían por el trabajo que el Duque de Palma ejercía como directivo de Telefónica. La familia Urdangarín-Borbón se instala de nuevo en Cataluña, aunque al parecer no residirá en su mansión de Pedralbes, sino en una casa más modesta en las afueras de Barcelona. Han alquilado por unos 12.000 euros al mes su antigua residencia, considerada por muchos un palacete y valorada en unos seis millones de euros, en lugar de venderla por si el juez José Castro impone una fianza millonaria a Iñaki Urdangarin, imputado por su vinculación al caso Palma Arena. Los Urdangarín vuelven a su antigua vida en Barcelona, pero con cambios y significativos.