Las princesas danesas enamoran. Ya sea por su cercanía, por sus eternas sonrisas, su simpatía o su elegancia a la hora de vestir, lo cierto es que Mary y Marie encandilan en cada una de sus apariciones públicas, y esta ocasión no iba a ser diferente. Año tras año, las princesas no faltan a su cita con la Semana Internacional de la Moda de Copenhague donde, además de tomar nota de las nuevas tendencias, aprovechan para charlar animadamente con diseñadores, estilistas, modelos, organizadores o visitantes que acuden a disfrutar de los desfiles que se celebran en el Palacio de congresos de Bella Center, a las afueras de la capital.
Mary, que como protectora fue la encargada de inaugurar la feria, causó sensación con un elegante vestido azul marino de lunares, sandalias en tonos marrones y bolso de mano de color rosa. Pudo observar los nuevos diseños de Uffe Buchardt y Kim Grenaa, de la firma DANSK; los de Ganni o la diseñadora de bolsos Sarah Sheikh, propietaria de la marca Savannah Wild. "Me encantan los bolsos que se pueden colgar sobre el hombro, son muy prácticos cuando tienes niños", confesó la princesa.
Por su parte, la mujer del príncipe Joaquín de Dinamarca tampoco se quedó atrás en cuanto a estilo se refiere y dio una lección de buen gusto con una blusa blanca, que combinó con unos pantalones negros, zapatos de tacón con suela dorada y un precioso clutch en llamativos colores. Cada una fiel a su estilo, pero siempre perfectas para cada ocasión.
Durante su visita a la feria, las princesas fueron todo sonrisas y disfrutaron de lo lindo del recorrido que hicieron por algunos de los stands y presentaciones de los diferentes diseñadores que este año han formado parte de la feria. En el caso de la princesa Marie, se lo pasó en grande en el desfile de David Andersen, 'Cut Couture', charlando no sólo con el diseñador, que volvió a sorprender con sus propuestas, sino también con algunos de los invitados con los que compartió confidencias e impresiones.
La Familia Real danesa está aprovechando al máximo sus días de vacaciones. Así, tras regalarnos sus instantáneas más entrañables en su posado de verano en el palacio de Gråsten, durante estos días hemos podido ver a los príncipes Federico y Mary junto a sus cuatro hijos, Christian, Isabella, Vincent y Josephine, disfrutando de una divertida jornada en el parque de atracciones Legoland, mientras que el príncipe Joaquín participó en la Copenhagen Historic Grand Prix, donde estuvo acompañado de su mujer y su hijo, el príncipe Henrik, que es un gran apasionado de las carreras. "Es muy aficionado a los coches, lo lleva en los genes", confesó la orgullosa mamá a los medios allí presentes. "Tiene un gran potencial", aseguró su padre, que, sin embargo, se mostró algo cauto y confesó que todavía le queda mucho camino por recorrer antes de convertirse en un piloto de carreras.
