Lo que tenía que haber sido un día alegre y de celebración hoy en Copenhague ha terminado en tragedia. Henrik, el marido de la reina Margarita de Dinamarca se disponía a celebrar su 79 cumpleaños el castillo de Kronborg, en la ciudad de Elsinor, rodeado de cientos de ciudadanos que se trasladaron hasta allí para felicitarle. Como manda la tradición, una parte de los festejos de este día es el saludo al marido de la soberana con 21 salvas de cañón en su honor, algo a lo que están acostumbrados, pero que en esta ocasión se ha saldado con uno de los artilleros herido de gravedad.
Según varios medios daneses, el grupo de soldados se disponía a comenzar las salvas con los cañones situados en los muros del palacio, cuando vieron una explosión y a uno de los artilleros precipitarse muro abajo, desde siete metros de altura. Por causas todavía desconocidas, el cañón se disparó la bala de fogueo antes de tiempo, provocando que un soldado, de 26 años, saliera despedido del muro, causándole graves heridas. Testigos presenciales de la tragedia cuentan que cayó inmóvil, antes la mirada atónita de todos los allí presentes. Varias personas se acercaron corriendo a él, algunas con agua para intentar sofocar sus quemaduras y, poco después, recuperó el conocimiento y comenzó a mover un poco las piernas, hasta que fue atendido por los servicios sanitarios que llegaron de inmediato al lugar de los hechos y lo trasladaron al hospital en helicóptero.
Según ha informado la policía, el soldado de 26 años ha perdido los dedos de una mano a causa de la explosión y sufre quemaduras en una de sus piernas, pero por suerte su estado es estable. También han informado acerca de cómo ha sucedido el accidente: "Según nuestras informaciones, estaba presionando una carga en el cañón, cuando ésta salió disparada", ha contado Henrik Rasmussen, portavoz policial.
