La Familia Real belga, con la reina Fabiola a la cabeza, ha presidido el concierto de otoño que se ha celebrado en el Palacio Real de Bruselas. Del brazo de la princesa Matilde, con quien guarda una excelente relación, Fabiola llegó a la sala donde se celebran los recitales de música con un vestido de manga larga en blanco y negro, medias, zapatos y guantes de color gris claro y un pañuelo anudado al cuello.
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Se trata de un concierto llevado a cabo por los organizadores de los famosos festivales de música de Valonia y de Flandes y después de disfrutar del recital, los reyes ofrecieron una recepción en palacio y estuvieron harlando con algunos de los músicos.
Junto a la reina Fabiola y la princesa Matilde, que sorprendió con una moderna falda de lentejuelas en todos marrones y dorados conjuntada con una blusa marrón, estuvieron los reyes de Bélgica, Alberto II y Paola, y los príncipes Astrid y Lorenzo.
Felipe de Bélgica fue el gran ausente del día, ya que no pudo ir porque todavía no ha concluido su visita oficial a China, donde estuvo unos días a compañado por su mujer, Matilde de Bélgica, y dondo ha viajado con un grupo de cuatrocientos empresarios con el objetivo de iniciar nuevas relaciones comerciales con empresas chinas.
Contadas son las apariciones públicas de la reina Fabiola de Bélgica, en comparación con las del resto de la Familia Real belga, pero sin duda, es todo un ejemplo de fortaleza. Fue a principios de 2009 cuando la soberana sufrió una bronconeumonía y tuvo que ser ingresada en un hospital de Bruselas. Durante este tiempo se llegó a temer por su vida, pero gracias a sus ganas consiguió recuperarse, y a sus 83 años continúa cumpliendo con los compromisos de su agenda que, aunque no sean tantos como antes, los disfruta mucho.
