No es fácil elegir los trajes de la realeza más bellos, cuando reinas, princesas, duquesas y otras damas de alta cuna y consortes tienen tantos a su disposición, verdaderas joyas de Alta Costura y Prêt-à-porter. Pero en hola.com nos encanta un reto y, a punto de coronar el año, nos atrevemos a coronar los atuendos más bonitos de este 2017 de glamour.
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El 'top twelve' de la moda real
La majestuosidad de las nuevas Reinas: sencillez vs. magnificencia
Las Princesas no herederas también reinan
Por únicos, no podían faltar en el caso de la reina Letizia ni el espectacular vestido rojo que lució en el 50º cumpleaños de Guillermo de Holanda, ni el Varela más oriental de los Premios Princesa de Asturias, ni el ultrafemenino de falda plisada de la víspera, ni el especialísimo vestido de un mantón de Manila de la Reina que firma Juan Duyos; tampoco los futuristas de Charlene de Mónaco para la Gala de la Cruz Roja y de Victoria de Suecia para la gala del Premio Polar Music. Velada que Magdalena de Suecia vistió de romanticismo con un conjunto floral crema y rosa.
De Máxima de Holanda, mucho se podría elegir, porque también es máxima en el vestir. Pero la relevancia del acontecimiento de su puesta y la belleza de la creación no admitía disyuntiva posible: el top one de la reina Máxima de este año no podía ser otro que el vestido de tonos púrpura, malva y oro, creado expresamente para ella por el diseñador holandés Jan Taminiau, para el 50º cumpleaños de su marido.
Carlota Casiraghi y la Duquesa de Cambridge o Rania de Jordania y Mary de Dinamarca, elegantes entre elegantes, también contribuyen a esta selección con exquisitos vestidos y joyas para reinar una noche, con trajes modernistas como símbolo de una monarquía moderna o estilismos dignos de un cuento de hadas. A 2018 le pedimos que se parezca a 2017: que traiga buenas nuevas y el glamour de siempre. Auguramos que será como mínimo igual de sublime, si no más con la entrada a palacio de Meghan Markle.
