Es elegante, solidaria, estilosa... y muy natural. Rania de Jordania, una de las Reinas más apreciadas por su belleza y su participación en incontables fines benéficos, siempre ha sido conocida por su cercanía y proximidad, especialmente desde que se abriera sus cuentas personales en las redes sociales para contar a sus seguidores no sólo los actos oficiales a los que acudía, sino lo que ocurre en su día a día y en su familia. Precisamente las redes sociales han sido una vez más el medio empleado para mostrar su lado más espontáneo, esta vez, comiéndose una hamburguesa.
Con una gran hamburguesa, un pequeño cuenco de mayonesa y un recipiente con patatas fritas recién hechas; así ha comenzado la reina Rania su fin de semana. La soberana acudió a un local de un centro comercial en la capital jordana y, lejos de tratar ocultarse y pasar desapercibida, compartió orgullosa el momento de su almuerzo en su cuenta personal de Instagram. Eso sí, sin perder un ápice de elegancia: la soberana se arriesgó a comer su hamburguesa con un impoluto abrigo blanco, luciendo además unos bonitos pendientes.
Pero no todo ha sido tiempo de ocio para Rania este fin de semana. El sábado, la soberana acudía a la inauguración del Foro de Habilidades del Profesor, una iniciativa organizada por la Queen Rania Teacher Academy, donde dio un discurso sobre la importancia de la enseñanza y la educación. Además de mostrar una vez más su compromiso social, Rania volvió a dar una lección de estilo, con una falda negra con vuelo de dos texturas que combinó con un jersey blanco.
La soberana completó su discurso en la conferencia con algunos mensajes de apoyo a la causa en sus redes sociales: "Si alguna vez hubo un momento en que necesitáramos desesperadamente un renacimiento en la educación para capacitar a nuestros jóvenes, es ahora. Si hay una profesión que puede impulsar el futuro y la calidad de vida de nuestros hijos, es la enseñanza". Y es que con Rania de Jordania, elegancia, solidaridad y compromiso son una combinación perfecta.
