Se ha cumplido ya una semana desde que la reina Fabiola de Bélgica fuera hospitalizada en la Clínica Saint-Jean de Bruselas a causa de una bronconeumonía. Aunque su estado de salud aún es preocupante, fuentes de la Casa Real belga aseguran, en un escueto comunicado, que "ha experimentado una leve mejoría" aunque continúa en la Unidad de Cuidados Intensivos. De la misma forma, se indica que su estado es "estable" y que "el tratamiento sigue su curso".
Durante su ingreso hospitalario no se han hecho esperar las visitas de algunos de los miembros de la Familia Real belga. El primero en acudir a verla fue su cuñado, el rey Alberto II, a mitad de semana. Tampoco quisieron dejar de interesarse por su salud los Príncipes Herederos, Felipe y Matilde, con quienes la viuda del rey Balduino mantiene una estrecha y cordial relación.
Una operación muy reciente La reina Fabiola era sometida hace medio mes a una operación de las glándulas tiroides en el Hospital Universitario de Luik. Pero, según aseguran portavoces de Palacio, el postoperatorio discurrió correctamente. Así pues, la intervención nada tendría que ver con la afección pulmonar que actualmente padece la soberana de origen español.
No obstante, a sus 80 años de edad, la reina Fabiola debe convivir a diario con la artrosis y el reuma que la aquejan, lo que hace necesario que en todas sus apariciones públicas haga uso de un elegante bastón o se apoye en algunos de los miembros de la Familia Real belga.
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