Carlota y Álex dan rienda suelta al amor en aguas de Ibiza

La hija de la princesa Carolina disfrutó con su novio y un grupo de amigos de una jornada en alta mar

Por hola.com

El suyo es sin duda uno de los amores de este verano. Carlota Casiraghi y Álex Dellal apuran sus últimos días de vacaciones en Ibiza, lugar donde la joven celebró el 3 de agosto su veintiún cumpleaños tal y como informaba en exclusiva la revista ¡HOLA! la semana pasada. Acompañados por un grupo de amigos, la pareja de enamorados alquiló una embarcación para desplazarse hasta una cala ibicenca, donde degustaron el suculento arroz que se prepara en uno de los chiringuitos más conocidos de la isla.

La jornada continuó a bordo de una lancha neumática que uno de los restaurantes de la playa pone a disposición de los clientes. Carlota fue la primera en subirse a la zodiac y en seguida se unió a ella su novio, que se sentó a su lado rodeándola cariñosamente con sus brazos. Esta fue sólo la primera de las muchas muestras de cariño que los enamorados se prodigaron a lo largo del día. Sin importarles mostrar su amor en público, los jóvenes se dedicaron tiernas miradas y se abrazaron y besaron apasionadamente en la cubierta de la embarcación frente a la atenta mirada de sus amigos.

Un ‘look’ muy ibicenco
Con una belleza y elegancia naturales que sin duda ha heredado de su madre, la Princesa de Hannover, la menor de los Casiraghi lució una camisa blanca con bordados y gafas de sol para protegerse del sol. Sin embargo, en lugar de vestir falda o pantalón como ha hecho en anteriores ocasiones, Carlota se decantó esta vez por la parte inferior de un bikini para disfrutar cómodamente de este divertido día en el mar. La mayor de las hijas de [Carolina de Mónaco] completó su ‘look’ con un original bolso estilo ‘hippie’ adquirido en la isla blanca. Por su parte, Álex eligió una camiseta de algodón y un pareo en tono malva similar a los que suele llevar su ‘cuñado’ Andrea.

Carlota, de veintiún años, y su novio, un joven modelo británico de veinticinco, viven con ilusión su primer verano de enamorados. Un verano que les vio primero en Capri junto a la familia de ella a bordo del Pachá III y que después les ha seguido hasta la isla balear, lugar que ha sido testigo de excepción de su romance de juventud.