El espectacular cambio de imagen de la princesa Carolina

A punto de cumplir los cincuenta, la Princesa de Hannover se apunta a un nuevo y glamouroso "look"

Por hola.com

Poderosa, serena y tranquila, la Princesa parece dispuesta a abrir un nuevo capítulo para los Grimaldi. Una dinastía que ha logrado perpetuarse sobre una pequeña roca del mediterráneo desde 1297. Siete siglos de historia que reciben, de nuevo, con ella un soplo de aire fresco. Ya lo dijo un académico francés: "Donde Carolina aparece es como si resplandeciera el sol. Y cuando surge la luz, ¿quién no se alegra?". Si a esto le añadimos, además, que se acompaña de sus hijos y permite que el mundo vea cuánto los quiere y necesita, el poder de los Grimaldi se multiplica por mil. La princesa de Mónaco, pletórica en su madurez, y rodeada de bellos hijos, sabe que, con su sola presencia, impulsa la economía y alegra la vida de sus conciudadanos. Y sabe también que, entre todos -incluidos sus hijos y especialmente, Carlota- pueden regenerar la "corona".
Tras su mirada, se esconde un nuevo gran deseo: unión y glamour familiar en el principado. El reconocimiento definitivo de que Su vida se haya indisolublemente unida a este pequeño Estado de Europa y que hay que mirar de frente para que la mala fortuna se aparte, definitivamente, de sus vidas. Las tragedias, los divorcios, las penas, los escándalos, las rencillas familiares no son estampas alegres con las que reconquistar al mundo... A un mundo, por otra parte, dispuesto a dejarse seducir siempre por las princesas de Mónaco.
En esta nueva... Carolina, digna y gran princesa, madre ejemplar y esposa fiel, con una imagen mucho más próxima a la que siempre ofreció su madre -Carolina entiende lo que la princesa Grace quería decir cuando hablaba de princesas virtuosas-, Carolina se corta el pelo y se lo peina para atrás para llegar pletórica a los cincuenta. Los cumple el 23 de enero, pero está hecha una reina.