Los vestidos son para las invitadas como un mono de trabajo lo es a muchos oficios. Son esa pieza comodín, versátil y ultrafemenina que la mayoría de convidadas a una boda eligen y acompañan con tocados, sandalias y joyas para la ocasión. Sin embargo, porque no siempre es necesario vestir un mono de trabajo, tampoco lo es llevar una sola prenda en un día tan especial. Los conjuntos de blusa y falda son la alternativa más solicitada entre quienes desean salirse de la norma, ser originales y dar una nota de actualidad y tendencia a su estilismo. Las firmas del sector nupcial lo saben y en sus últimas colecciones han presentado propuestas tan interesantes como atemporales.

Tie-dye style

La falda Antonina es capaz de llevarse todo el protagonismo de la celebración. Hablamos de una de las prendas más deseadas de Panambi, que fusiona colores como el coral o el morado en un mismo modelo. La firma sevillana cree en una primavera/verano de colores intensos que resulten favorecedores cuando se utilicen después de broncearse, en su justa medida. Es por ello que la suma de su blusa con mangas abullonadas y falda larga está pensada enlaces de tarde, dentro y fuera de la ciudad. 

Con la espalda descubierta

Blanco, negro y rojo son los tres tonos que elige Cherubina para construir un look de invitada favorecedor y siempre elegante. La combinación de la blusa de color vibrante y la falda con estampado Vichy convencerán a invitadas clásicas con mucha personalidad. La abertura en la espalda pone el punto atrevido, aunque equilibrado. A la hora de acompañarlo, unos complementos en dorado o en el mismo rojo del top harían la propuesta todavía más sugerente.

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En versión bicolor

La fórmula bicolor es acierto seguro y no son pocas las influencers que han probado sus bondades. Invitada Perfecta (o Sandra Majada) es una de las que suele recurrir a ella, tal y como demuestran los numerosos estilismos que cuelga en sus redes sociales. En este caso el mix más tradicional, el de blanco y negro, lo firma Apparentia en forma de blusa con mangas jamón y una falda negra con plumas de avestruz. Para contrarrestar y equilibrar la elección, la prescriptora de estilo se decanta por un clutch rojo.

A modo de falda-pantalón

Siguiendo la tendencia del largo midi, pero en un formato aún más cómodo, la falda pantalón se presenta como la opción perfecta para bodas de estética relajada, en el campo o junto al mar. De tejidos ligeros y con colores que van desde los pasteles a los más vibrantes, las firmas de invitada han apostando por modelos juveniles para esta temporada. En La Croixe combinan sus Evita Pants, con vuelo y corte culotte, con una blusa blanca escotada.

De inspiración botánica

Con la esencia de filmes como Memorias de África o Australia como telón de fondo, abundan los nombres del sector que han hecho de los estampados y looks a lo explorador su principal inspiración para esta temporada. Vogana es uno de ellos y su dos piezas con print botánico, compuesto por el top Gina y la Falda Milena, vencerá, como las citadas películas, el paso del tiempo.

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Escote halter

Tan sofisticado como veraniego, el escote halter se presenta como esa alternativa chic y muy francesa a las opciones más tradicionales. En formato de vestido, pero especialmente a modo de blusa, no hay tonalidad ni estampado que se le resista. En Alenia lo han incorporado en su conjunto Elena, que estiliza la figura y adelgaza brazos de forma discreta. 

En colores suaves

Las seguidoras de diseñadores de corte conceptual y espíritu renovador prefieren piezas con aires juveniles, poco convencionales y con un punto artístico. En este caso, el trabajo de Ezelma, de esencia industrial y al mismo tiempo muy femenina, podría ser su primera opción ante una boda. La casa, que fabrica en España todas sus colecciones, se decanta por los colores suaves en este look para invitadas formado por una falda con maxibolsillos y una blusa amplia.

Con flecos

Vivieron su mejor momento en 2019, pero los flecos no se han marchado aún de chaquetas, camisas, vestidos y faldas. Para los meses de más calor, se apuesta por las mezclas de estampados y tonalidades atrevidas y alegres, que dan luz al rostro. En la imagen, una de las propuestas de Isabel Ogallar.

Romántico

En la reciente colección de Boüret, los colores pasteles, la paleta de rosas y lilas, los estampados históricos y cierta inspiración a lo María Antonieta son las claves protagonistas. Las convidadas más románticas encontrarán en los tops con volumen y un punto retro y en las faldas de print floral sus mejores opciones. A la hora de pensar en los complementos, en este tipo de estilismos, el minimalismo es el rey. Menos es más cuando las dos piezas ya tienen mucho de original.

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Con lazo: Lizzana

La estética naíf, cuando se elige de forma discreta, puede resultar original y rejuvenecedora a partes iguales. Mediante unos lazos, ese gesto de estilo que da un giro completo a una prenda sin necesidad de recargarla, es posible lograrlo. En Lizzana lo saben y por eso proponen este estilismo de blusa a modo de top y falda mini con vuelo de inspiración años 60. Una apuesta ideal para prebodas y enlaces informales que puede tener segunda vida tras este tipo de celebraciones.  

En versión nocturna

En bodas que duren hasta el amanecer o en prebodas que se celebren por la noche nada mejor que unas estudiadas dosis de brillo. Las lentejuelas pueden ser las mejores compañeras de una blusa negra y festiva. La propuesta de Veneno en la piel, de top escotado total black y maxifalda Gold en color verde puede aliarse con unos accesorios de excepción: unos pendientes tamaño XL o un clutch de inspiración étnica.