Las mangas abullonadas se han convertido en una constante dentro del mundo de las invitadas. Pero esta tendencia no solo es apta para las grandes ocasiones. Las que más entienden de moda han demostrado que se pueden lucir en blusas que se combinan con pantalones vaqueros o en vestidos sencillos que sirven para cualquier plan. Pero si hay un diseño en el que se reinterpretan una y otra vez es en los vestidos de novia. La pasada primavera vimos que las mangas farol se asomaban tímidamente al mundo nupcial. Ahora comprobamos que cada vez más firmas y novias se atreven con esta propuesta algo que, en realidad, no sorprende. Este corte es especialmente favorecedor para chicas que quieran ganar un poco de volumen en la parte superior del cuerpo o compensar la silueta si las caderas son más anchas. Lo mejor es que es una tendencia modelable y perfectamente adaptable a los gustos y las necesidades de cada novia.
Mangas con volumen
Una de las ventajas de este tipo de mangas es la posibilidad que ofrecen de controlar el volumen. No solo nos referimos al tamaño, también al modo en que se reparte. Hay diseños, como el de la imagen de la firma Panambi, que juegan con un aumento en la zona en la que la manga se une al vestido es decir, en el hombro. Estos modelos son especialmente favorecedores para novias con los hombros bastante estrechos y que buscan aumentar visualmente el tamaño. Una solución muy adecuada tanto para aquellas que tienen silueta triangular como para esas chicas bastante delgaditas que quieren simular más curvas.
Mangas con volumen
Pero, como vemos en este diseño de Zoe Rowyn, el volumen también puede ser mayor en la parte inferior de la manga. Aunque pueda parecer un cambio insignificante, este hecho modifica la silueta, ampliando la zona del peso y ayudando a equilibrarla, sobre todo cuando su tamaño no es demasiado grande. Los hombros continúan marcados, pero el protagonismo se traslada a esta otra parte del cuerpo.
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Con adornos
Que las mangas tengan un extra de volumen no significa que tengan que ser, necesariamente, diseños sobrios y sencillos. Cada ves más diseñadores adornan esta parte del vestido con todo tipo de detalles, con los que logran modelos diferentes y renovados. Este, de Romancera, salpica unas mangas bastante voluminosas con perlas, uno de los elementos que cada vez falta menos en los vestidos de novia. Este adorno se utiliza para llenar de romanticismo vestidos, velos, complementos e, incluso, se utiliza para renovar los peinados más tradicionales.
Con adornos
Otras firmas, como Beba's, aprovechan distintos elementos de tendencia para ganar un mayor volumen sin necesidad de recurrir a mangas que, para algunas novias, puedan resultar demasiado excesivos. Un ejemplo es el uso de flores 3D que, como vemos en el diseño de la imagen, se reparten de manera equilibrada a lo largo de toda la manga para lograr un efecto elegante y muy favorecedor. Algo que se consigue, además, al combinarlas con un vestido de lineas rectas. Una forma de unirse a dos de las tendencias más solicitadas de la temporada y hacerlo de un modo más original.
Mangas con transparencias
A tejidos tan propios del mundo nupcial como el crepé, el guipur o el mikado es necesario añadir el tul. Este material, cada vez es más utilizado para elaborar vestidos de novia, suele originar diseños con un aspecto muy romántico y faldas llenas de volumen que, gracias a la ligereza de este tejido, no resultan excesivamente pesadas ni sobre el cuerpo ni a la vista. Es precisamente esa liviandad la que aprovechan algunos diseñadores al utilizar este material para confeccionar mangas de fantasía en las que los volúmenes son los absolutos protagonistas. En la imagen, Alessandra Rinaudo, Chief Artistic Officer de Pronovias, contrapone este elemento con un vestido entallado que busca potenciar las curvas de la novia.
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Mangas con transparencias
A esta misma tendencia se suma Liz Martinez que aprovecha los beneficios de este tejido para crear vestidos llenos de contrastes, en los que la sensualidad y el romanticismo se unen. En el caso de la imagen, por ejemplo, vemos una evolución del tradicional naked dress que envuelve el cuerpo de la novia, insinuando con delicadeza su silueta, y otorgándole un aire más etéreo gracias a las mangas.
Largas y con volumen
Otra de las ventajas de este tipo de mangas en las que el volumen es el gran protagonista, es que no solo se pueden realizar en diseño que se corten por encima del codo, también se pueden alargar hasta las muñecas. En este caso es posible, como en el anterior, distinguir dos opciones mayoritarias: las que ganan el volumen en la parte superior, compensando la anchura de los hombros, y las que lo adquieren conforme se acercan al puño, como sucede en este modelo de la colección My Universe de Marta Martí. Una opción ideal para las jornadas más frescas.
Largas y con volumen
Esta propuestas de L'Arca, con un volumen que crece hasta acercarse al puño y un acabado decorado con encaje, es ideal para diseños sencillos y minimalistas con detalles que marcan la diferencia. Además, son especialmente favorecedores para chicas que, sin querer aumentar demasiado el volumen de la zona de los hombros o del pecho tratan de potenciar ambas partes del cuerpo.
Hombros al aire
Hemos visto este tipo de mangas combinadas con vestidos con escote en 'V', cuellos cerrados y redondeados, espaldas abiertas, prendas entalladas… Señales de que funcionan bastante bien casi en cualquier diseño. Pero si hay un acabado que no se les resiste ese es el que deja los hombros al descubierto. Y es que, aunque suele ser complicado añadir a los escotes palabra de honor algún tipo de manga, estas funcionan, algo que demuestra la propuesta de la imagen, de Tara Lauren.
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Hombros al aire
Pero que los hombros queden al descubierto no es sinónimo de utilizar, necesariamente, mangas llenas de volumen de un tamaño más o menos considerable. Este escote también funciona especialmente bien con opciones sencillas y minimalistas, de un tamaño reducido. En este modelo de la colección Voyage de Escuer, el diseñador juega con los volúmenes y crea un escote de lo más sensual y favorecedor, apto para las novias más tímidas.