Es chic, es 'retro', está de moda y además es mucho más sencillo y práctico que cualquier otro corte. El pelo corto, ya sea bob, pixie o garçonne, es una excelente elección cuando buscamos un look que nos permita estar perfectas las 24 horas del día. Sin embargo, cuando llega la hora de dar el 'sí quiero', el pelo corto puede suponer un problema para las novias más coquetas: ¿Quedará bien con el velo? ¿Y si quiero hacerme un moño clásico?
Una de las últimas en someterse al poder de la tijera y cambiar por completo su estilo ha sido la actriz Emma Watson: tras diez años interpretando el papel de Hermione Granger en las películas de 'Harry Potter', la jovencita británica ‘cortaba’ para siempre con su pelo y su personaje debutando un pixie de lo más sexy sobre la alfombra roja poco después de finalizar el rodaje de la última entrega de la saga.
Un ejemplo perfecto de cómo lucir el corto más corto hasta en las ocasiones de gala, sin perder un ápice de estilo. Lo más importante: que la forma del corte se ajuste a la perfección a tus facciones, te favorezca, y resalte tus puntos fuertes, ya sea la mirada, la línea de los hombros o la sonrisa. Aunque el pelo corto no está reñido con el velo (los velos cortos con bordados en forma de topos de inspiración años 50 combinan a la perfección con este tipo de looks), sí es cierto que otros complementos, como una sencilla tiara, una banda de encaje o los broches de cristales o tocados pueden lucir mejor sobre un peinado corto que encaramados a un gran recogido.
Y si el velo es el punto débil del pelo corto, las joyas son el fuerte: con el pelo corto el cuello y las orejas quedan completamente despejados, por lo que es una oportunidad de oro para lucir esa preciosa gargantilla familiar o los pendientes de brillantes de tu pedida, sabiendo que van a destacar y a lucir mejor que con ningún otro peinado.
