Su gira de conciertos por Latinoamérica ha constatado lo que ya sabíamos: que sus fans le adoran hasta el delirio. Pablo Alborán sabe que a sus incondicionales les encanta escucharle en directo y por eso, antes de meterse en el estudio para grabar sus nuevas canciones, se ha embarcado en una mini gira que le ha llevado ya a México, Miami y Puerto Rico. Dejando de lado dimes y diretes, en todos estos destinos sacó sus mejores armas, románticas baladas y bailes con ritmo, que hicieron que nadie se quedara sentado en su asiento.
“Muchas gracias por el cariño y por el constante amor... Cada vez que vengo aquí me siento en casa” comentó en Puerto Rico. El apoyo incondicional no es sin embargo lo único que le regalan sus seguidores, también de vez en cuando tiene detalles como la sorpresa que le dieron en el camerino en esta última cita. Dos de sus fans se metieron en el backstage para llevarle algunos obsequios, entre los que estaba un libro. Una forma de agradecer los buenos momentos que les hace vivir cuando coge un micrófono.
Su próxima parada será en Argentina (el 21 y 22 de marzo en el Teatro Ópera de Buenos Aires) y una vez se reencuentre con su público allí comenzará a dar forma a su nuevo trabajo. En recientes declaraciones aseguró que se trasladará el mes que viene a Los Ángeles para dar forma a este material que mezclará ritmos diferentes y seguro alguna de las baladas que le han convertido en uno de los intérpretes que más enamora. Sobre esta montaña rusa en que se ha convertido su carrera, meteórica y llena de éxito, ha asegurado: “He tenido que aprender en tres años cosas que se aprenden en mucho tiempo. He tenido que ponerme las pilas, adaptarme a la velocidad con la que se viene todo esto... pero ha habido tantas satisfacciones, que es una bendición”.
