Ha llegado el momento. Después de semanas de batallas, valoraciones y consejos de los coaches, los aspirantes se han estrenado en directo. Comienza la tercera fase de La Voz, una etapa en la que el público tiene un papel muy importante a la hora de decidir quién se convierte en estrella. Los concursantes, nerviosos, pero también con muchas ganas, se subieron al escenario para demostrar sus tablas y su saber estar en una gala en la que una vez más las emociones estuvieron a flor de piel. La mecánica fue sencilla: de cada equipo cantaron tres concursantes, el público salvó a uno con sus votos y el coach libró a otro de la expulsión. Además todos tuvieron la oportunidad de cantar con sus mentores, una ocasión especial que seguramente nunca olvidarán.
El público salvó a Paco Arrojo, uno de los favoritos del concurso, mientras que David Bisbal eligió a Yanela, tras algunas dudas, para que continúe su camino hacia la final. El almeriense les dio indicaciones antes de que se enfrentaran a su destino y mientras cantaban se puso de pie, aplaudió y animó como el que más. Rosario vibró también con el arte de sus alumnos. Anabella, Jorge y Mónica cantaron con ella Qué bonito, antes de conocer el veredicto. Jorge fue salvado por sus incondicionales y a la profesora le tocó la difícil decisión de elegir entre dos “monstruas”, como las llamó cariñosamente. Anabella fue la afortunada.
Melendi llegó al directo con tres mujeres de estilos bien definidos: Maika, con su peculiar voz y estilo rockero, Paula, la juventud y la dulzura, y Claritxel, la profesionalidad y veteranía. Los espectadores se volcaron con el rock y Melendi con su favorita, Paula, que aunque no hizo su mejor papel esa noche tiene, según él, un gran potencial. Malú salvó a Nuria, que se unió al salvado por el público Pau Piqué, muy emocionado por uno comentario de un espectador que equiparó su estilo al de su ídolo Frank Sinatra. Tanto le gustó al veterano artista que se le escaparon las lágrimas y tuvo que ser consolado por Malú. Héctor se quedó a las puertas de lograr su sueño, aunque cantó con todos Blanco y negro, un conocido tema de la coach que sin embargo no quedó muy lucido ya que los artistas se equivocaron en varias ocasiones. La tensión y los nervios jugaron una mala pasada.
De nuevo la audiencia se volcó con el espacio que obtuvo casi cinco millones de espectadores y un 32,6% de cuota de pantalla, convirtiéndolo en la primera opción de la noche. ¿Qué ocurrirá la semana que viene? ¿Se ha salvado tu favorito? Sigue votando por tu preferido en nuestra votación, ¿será él La Voz?
