En una entrevista para la revista Redbook, Christina asegura que está muy afectada. “Hay días en los que es imposible levantarte de la cama y, menos, ejercer de madre. No es fácil, ha habido muchas lágrimas y tristeza”. En estos momentos tan difíciles sus mejores apoyos los ha encontrado en la gente cercana a ella, su madre y sus amigos, “que están ahí para mí las 24 horas del día, siete días a la semana, y en los que puedo confiar y apoyarme”. Se ha sabido que Christina ha tenido que acudir al hospital hace pocos días, se dice que fue debido a una caída en la que se hizo una pequeña herida en la boca.
Su atención ahora mismo se centra en su hijo Max, algo que deja claro en esta entrevista. “Sus necesidades y alegría son mis principales prioridades y mi mayor preocupación es protegerle y hacer que se sienta seguro”. La pareja anunció su separación a principios de octubre y poco después ella presentó los papeles del divorcio citando “diferencias irreconciliables” y en ellos solicitaba la custodia del niño y se señalaba que habían firmado la separación de bienes.
