Conrad Murray, acusado de la muerte de Michael Jackson, se defiende: habría sido el propio cantante quien se inyectó la dosis letal de Propofol

Podría ser uno de los argumentos utilizados por la defensa en el caso

Por hola.com

Mientras decenas de fans cantaban We are the World y pedían justicia a las puertas del juzgado, en el interior, la familia de Michael Jackson se encontraba, una vez más, cara a cara con el presunto responsable de su muerte. El juez consintió que el doctor Conrad Murray, acusado de homicidio involuntario, siga ejerciendo la medicina hasta la fecha de la próxima vista por la muerte del artista, fijada para el próximo 14 junio (el día 25 de ese mismo mes se cumple un año de su fallecimiento).

 

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La defensa de Murray explicó que el cardiólogo tiene problemas financieros, por lo que ejercer su profesión es importante para pagar los costes del proceso. “Su capacidad para poder pagar su propia defensa depende casi en su totalidad de su capacidad de poder seguir atendiendo a pacientes” comentaron sus letrados. Los padres, Joe y Katherine, y algunos de los hermanos del rey del pop, Janet, Jermaine y Randy, siguieron con atención la vista oral y reiteraron que están convencidos de la culpabilidad del médico.

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Se han comentado estos días además algunos de los argumentos que podría utilizar la defensa para demostrar la inocencia de Murray, que se ha declarado no culpable de los cargos que se le imputan. Dirán que el artista era adicto a la Coca-cola, pese a la recomendación de Murray de que no la bebiera en exceso para poder conciliar el sueño. Además, según su versión, habría sido el propio Jackson el que se inyectó la sobredosis mortal de Propofol, el anestésico que le causó el paro cardíaco, cuando Murray le dejó solo en la habitación.

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La familia no da crédito a esta historia, ya que hace algunos días un guardaespaldas de Jackson contó que el médico había interrumpido la reanimación del artista para recoger y esconder las botellas del medicamento que había en la habitación. El padre de Michael, Joe Jackson, ha dicho: “No me lo creo. Si fuera cierto, ¿por qué Murray escondería todas las botellas?”. Una pregunta más que queda de momento sin respuesta, aunque expertos en casos criminales aseguran que es una versión un tanto complicada de demostrar, ya que el doctor dedicaba en aquellos momentos todo su tiempo a Jackson.