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Una elección adecuada de vestuario, looks de belleza milimetrados, kilómetros de alfombra roja y su consecuente posado ante el photocall. Fuera de la gran pantalla, las actrices más reconocidas de la filmografía internacional se convierten en su propia imagen de marca, buscando por ello deslumbrar a cada momento con un estilo reconocible, que a su vez las haga sentirse cómodas en su propia piel. Ese es el caso de Jennifer Aniston quien, a sus cuarenta y seis años, puede presumir de ser una de las actrices más queridas de Hollywood, así como de poseer uno de los beauty looks más emulados de la historia —¿qué rubia no ha intentado conseguir esa melena?—. La experiencia vale un grado, y quizás por ello Aniston ha sabido reconocer un estilo que funciona y que parece ser su 'zona de confort'. En el 80 % de sus últimas apariciones públicas, la actriz se ha decantado por unos auténticos ganadores—bien combinado o por separado—, los colores blanco y negro. ¿Quieres conocer las bondades de esta pareja y cómo les ha sacado partido? Toma nota.
Estiliza, es sobrio, elegante, atemporal y además increíblemente femenino. El negro se ha convertido en una constante dentro del vestidor de Jennifer Aniston, quien no ha dudado lucirlo en forma de looks ‘total black’ en los que los que ella lleva los pantalones —literalmente—. Fue el caso del estilismo que eligió para acudir al show de Jimmy Fallon, en el que apostó por unos sencillos pantalones capri de pinzas y un 'top' aderezado con volantes a ambos lados de Givenchy. Durante el Festival de Santa Bárbara, la vimos con un discreto mono fluido de pantalón palazzo, que contrastaba con su cinturón de piel.
Y si hablamos de piezas eternas e infalibles, era prácticamente imposible que la actriz no hiciese un hueco al cénit de la elegancia: el little black dress o, en su defecto, a conjuntos de falda y top. De hecho, para acudir al Festival de Cine de Toronto, Jennifer Aniston no dudó hacer de un top de Valentino y una coqueta falda tableada de Emanuel Ungaro sus mejores aliados. Por otra parte, la veríamos enfundada en un sensual Saint Laurent con escote plunging para asistir al programa de Jon Stewart; o hacer una leve concesión al blanco durante los People Magazine Awards, para los que la actriz se decidió por un vestido negro con bajo en crudo de Fausto Puglisi.
Minimalistas, sencillos y sutiles. A pesar de ser opuestos, el poder del blanco y el negro cuando entran en juego es, sencillamente, indiscutible. Eso mismo debió pensar Jennifer Aniston, quien no ha dudado optar por la combinación de este dúo infalible cuando no lo hace únicamente por una de las dos tonalidades. Fue el caso, por ejemplo del estreno de Horrible Bosses 2 en Londres, donde pudimos verla con falda lápiz negra y 'top' peplum blanco de Bouchra Jarrar. Para la première en Los Ángeles, sin embargo, se decantó por un vestido blanquinegro de encaje con cuerpo embellecido de Zuhair Murad.
Y de su uso combinado a la aparición de la tonalidad nívea en solitario. El blanco se ha convertido en otro de los fetiches de Aniston, quien optó vestirlo en forma de minivestido cut-out de Giambattista Valli durante el estreno de Cake en Los Ángeles. Sin duda, una elección más que acertada. Por otro lado, en el Variety Studio: Actors On Actors, la actriz presumía de piernas y bronceado con un monocromático vestido blanco de falda cruzada.
¿Y cuál es su elección estrella sobre la alfombra roja? Por supuesto, el negro se erige como el color más selecto cuando la ocasión lo requiere, sobre todo en aquellos momentos en los que no es aconsejable experimentar en demasía —como es sobre una red carpet—. En casos así, Jennifer se ha decantado por el efecto velo de un entubado Zuhair Murad de encaje; o por la sobriedad de un Saint Laurent con ‘paillettes’ y escote halter que le permitió lucir pierna a discreción durante los Globos de Oro.
¿Te convencen las combinaciones y las prendas por las que se ha decantado la actriz?
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