Hace justo una semana desde que Kate Upton desveló ante sus más de 6 millones de seguidores en su cuenta de Instagram la inesperada noticia de próxima maternidad y ya nos ha dejado varios looks que hacen presagiar cómo será su armario en los próximos meses. La modelo hizo gala de su estilo premamá en la imagen con la que anunció su embarazo, en la que aparecía en la terraza del hotel W South Beach con un traje de chaqueta rojo de Marissa Webb, camiseta sencilla blanca y gafas de sol a juego y que sencillamente tituló 'Embarazada en Miami' para revelar la noticia. A esta primera aparición pública como futura madre primeriza le siguió otra en Washington junto a su marido, en la que apostó por un traje muy similar al anterior pero en color blanco de Anine Bing. Cuando parecía que el dos piezas se iba a convertir en su combinación fetiche durante estos meses, la estadounidense ha vuelto a sorprendernos con un cambio de registro.
Kate acudió ayer junto a su pareja, el jugador de Los Astros de Houston Justin Verlander, a una fiesta organizada por la revista Maxim, de la que ha sido portada con motivo de su nombramiento como la mujer más sexy del mundo, y demostró que incluso con sus nuevas curvas sigue siendo digna merecedora del galardón.
La modelo de 26 años apostó por las lentejuelas para uno de sus primeros eventos oficiales tras dar a conocer su futura maternidad, y brilló -literalmente- con un vestido midi de cuello cisne y manga larga cuajado de estos ornamentos que creaban un original degradado a lo largo de la falda. Para potenciar su tripita y marcar su figura, Kate le añadió un sencillo cinturón negro elástico bajo el pecho. Como complementos, sumó maxipendientes dorados y unas finas sandalias negras estilo gladiador.
La pareja, que se casó en Italia en noviembre de 2017, aún no ha confirmado cuándo está previsto que llegue su primer hijo, pero la barriguita de Kate nos hace pensar que está ya en su segundo trimestre, por lo que el bebé nacería previsiblemente a finales de año.
