A pesar de que cuentan con vestidos de alto impacto y diseños de lo más envidiable, una parte muy importante del estilo de las royals está marcada por la elección de los accesorios. El atrevimiento de Máxima de Holanda, las tendencias de doña Letizia, el estricto protocolo de las princesas y duquesas británicas... Los zapatos, bolsos, joyas y, cómo no, tocados, marcan la diferencia. En este último año, muchas mujeres de la realeza han caído rendidas ante el que es el complemento estrella de las expertas en moda: la diadema ancha. Analizamos quién se ha sumado a esta tendencia y cómo la defiende cada una.

Kate Middleton

El pasado 9 de noviembre la realeza británica se reunió para asistir al Festival del Recuerdo, un solemne acto en el que visten de tonos oscuros en señal de respeto. Para otorgar un punto más sofisticado a su conjunto, la duquesa de Cambridge remató con una diadema negra de pedrería que pertenece a la casa española Zara. Aunque actualmente está agotada, tenía un precio original de 17,95 euros.

Kate Middleton

No es la primera vez que la Duquesa elige un accesorio de este tipo, de hecho, el tocado trenzado en tono teja que eligió para el bautizo de su sobrino Archie, un diseño de Juliette Botterill Millinery, fue muy comentado. Desde HOLA te proponemos varios similares para convertirte en la invitada perfecta esta temporada.

Beatrice Borromeo

Hace unos días, Pierre Casiraghi y su mujer asistían al desfile de Armani, demostrando una vez más su pasión por la moda y su amistad con el diseñador. Para la ocasión, ella escogió un infalible look monocolor en negro, que acompañó de una diadema de terciopelo burdeos con detalle de nudo, una opción ideal para tus estilismos navideños. 

Doña Letizia

A pesar de que en España no suele apostar por tocados, un complemento imprescindible para royals como Kate Middleton o Máxima de Holanda, la Reina sorprendía el mes pasado con una nueva diadema ancha en la entronización del emperador Nahurito en Japón. Concretamente, optó por un modelo de la casa sevillana Nana Golmar confeccionado en rafia y terciopelo rosa empolvado. 

Doña Letizia

En junio, la Reina acompañó a su marido en la ceremonia de la Orden de la Jarretera en Londres, cita en la que estrenó un vestido de Cherubina y tocado de la misma casa española, con el que ceñía al protocolo inglés. Se trataba de una elegante diadema negra con adorno floral y velo de red. 

Máxima de Holanda

Una de las señas de identidad del vestidor de la reina de los holandeses es la importancia que le cede a los accesorios más llamativos. A pesar de que lo suyo son más las pamelas y tocados XL, también ha sucumbido a las diademas anchas al estilo Prada que adoran las expertas en moda. En la imagen, con una en rosa decorada con pequeñas lentejuelas.

Eugenia y Beatriz de York

Las hijas del príncipe Andrés y Sarah Ferguson también son grandes fans de este tipo de tocados, que llevan tanto en actos oficiales como en bodas o fiestas. En la imagen, Beatriz lleva una que imita la forma de las hojas, mientras que su hermana Eugenia opta por una en tono crudo decorada con un discreto velo de red y pequeñas plumas.

Eugenia de York

La princesa ha llevado varias veces este año este diseño negro con adorno fruncido en el centro, que aúna clasicismo y modernidad gracias a su acabado de cuero. 

Beatriz de York

Su hermana mayor ha demostrado en numerosas ocasiones que no tiene miedo a innovar, y, en lugar de acompañar el llamativo vestido verde que eligió para la boda de Ellie Goulding el pasado septiembre con complementos minimalistas, le sumó una diadema negra con adornos florales en clave XL.

Alessandra de Osma

Si hay una royal cuyos estilismos de invitada despiertan pasiones, esa es la mujer de Christian de Hannover. A finales de octubre asistió a una boda en París con un vestido de Andrew Gn que acompañó de un tocado morado que agregaba un elegante velo de red.

Pippa Middleton

La hermana de Kate no pertenece oficialmente a la familia real, pero sus acertados estilismos también generan gran expectación. El pasado mayo triunfó con su elección para la boda de Lady Gabriella en el castillo de Windsor, un vestido azul empolvado con detalles florales que coordinó con diadema de terciopelo a tono.