Anoche Nueva Jersey acogió la esperada gala de los MTV Video Music Awards, una ceremonia en la que se destacaban los mejores videoclips del último año. Por la alfombra roja desfilaron numerosas celebrities con sus estilismos más cañeros, desde las hermanas Hadid a conjunto hasta Taylor Swift con un original vestido-blazer multicolor. Sin embargo, hubo quien asistió al evento pero prescindió de posar ante las cámaras, como fue el caso de Miley Cyrus, que se subió directamente al escenario presumiendo de nuevo tatuaje, o Sophie Turner, que quiso apoyar a su marido Joe Jonas desde el patio de butacas. Aún así, hemos podido descubrir el look que escogió para la cita, un favorecedor diseño adornado con un accesorio que bien podría haber tomado prestado del vestidor de su personaje en Juego de Tronos.
Si hace unos días se convertía en una 'chica Bond' para celebrar el cumpleaños del cantante, ayer la actriz prefirió evocar a una modernizada Sansa Stark mediante su estilismo. Como es habitual, apostó de nuevo por Louis Vuitton, casa de la que es imagen, en concreto se decidió por una pieza de la colección Resort 2020, enfundándose en un ceñido vestido blanco de silueta tubo con cuello alto y manga larga que entallaba su característica figura esbelta. Lo combinó con unas sandalias negras de cuero con pulsera al tobillo decoradas con tachuelas, aunque este calzado no fue el complemento más llamativo del conjunto.
Sin duda, lo más comentado del estilismo de la británica fue el corsé que agregaba el vestido, una pieza negra que generaba un potente contraste bajo el pecho y potenciaba sus curvas. Además, añadía sobre él un cinturón de piel a conjunto que terminaba de generar ese efecto 'cintura de avispa'. Esta combinación de corsé + cinturón recordaba inevitablemente a las elecciones de vestuario de Sansa Stark en las últimas temporadas de la aclamada serie Juego de Tronos. A pesar de las evidentes diferencias, puesto que la ficción estaba ambientada en la Edad Media, lo cierto es que este complemento fue muy característico del personaje en su última etapa.
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Al comienzo de la trama, la hija mayor de Ned y Catelyn Stark era una niña que vestía con diseños vaporosos y un marcado estilo romántico, pero con el tiempo evolucionó hasta convertirse en una mujer fuerte y poderosa, un cambio que se vio absolutamente reflejado en su ropa. Los tonos oscuros, el cuero y, sobre todo, los corsés liberados de su concepción opresora y reconvertidos en un complemento más práctico y estético se convirtieron en las señas de su armario. Por lo tanto, no resulta extraño que Sophie, quien ha declarado en numerosas ocasiones estar muy orgullosa del desarrollo del que fuera su alter ego, quiera añadir ciertos toques al estilo Stark a su futurista vestidor.
