Meghan Markle da un paso más en sus nuevas obligaciones y ha afrontado su primer encuentro en solitario con la reina Isabel II en el condado inglés de Cheshire. Los looks que ha mostrado en sus actos oficiales desde que estrenó su título de duquesa de Sussex se han caracterizado por la discrección de las líneas sencillas y los colores neutros. Ahora, y siempre en un segundo plano para dejar todo el protagonismo a la soberana inglesa, vuelve a confiar en en las manos expertas de Clare Waight Keller, como ya hizo con su vestido de novia. La diseñadora británica ha confeccionado en exclusiva para ella este diseño tipo capa para Givenchy que, aunque pretenda pasar desapercibido, podría haber protagonizado una alfombra roja. Y es que, si echamos la vista atrás, Angelina Jolie llevó un diseño muy similar para asistir a la première londinense de la película Unbroken hace cuatro años.
Este look es la prueba definitiva de la afinidad de Meghan Markle por dar relevancia a los escotes, siempre recatados, discretos y ultrafemeninos. En su primer acto oficial tras su boda, encontró la forma de enseñar algunos centímetros de piel gracias a un vestido de mangas y escote semitransparentes. En su debut en Trooping de Colour apostó por Carolina Herrera y el escote Bardot favorito de las royals. Ahora, y siempre buscando el corte que le saque de lo convencional, la esposa del príncipe Harry consigue hacer único su estilismo apostando por un vestido en tonos neutros con capelina sobre los hombros. Este detalle, que nos traslada a los años 50 y al recuerdo de las grandes divas de la elegancia, ha vuelto con fuerza. Desde royals como doña Letizia, Carlota Casiraghi o Máxima de Holanda a actrices de Hollywood como Gwyneth Paltrow o Angelina Jolie... todas han indagado en las distintas formas de llevar estos vestidos de estética retro.
En el caso de la directora de Unbroken, se puede apreciar el claro parecido de su vestido con el modelo que estrena hoy Meghan Markle. El de Angelina es un diseño tipo cóctel con bolero de Ralph & Russo, que pone todo el foco de atención en su escote y lo hace tan impactante que se vuelve perfectamente apropiado para pisar una alfombra roja. La diferencia, es que la duquesa de Sussex ha completado su look con un cinturón de piel en contraste. También lo firma Givency, al igual que su bolso de mano, y se puede comprobar en la hebilla con la forma icónica del logo. Sin embargo, para sus zapatos, ha confiado en la diseñadora Sarah Flint eligiendo unos salones negros.
