La alfombra roja de la 65ª Edición del Festival de Cine de San Sebastián ha concentrado a casi un centenar de estrellas del panorama nacional e internacional estos días. Alicia Vikander, Úrsula Corberó, Paz Vega... han recibido grandes alabanzas por su estilo, sin embargo, durante la última jornada, destacan especialmente los escogidos por una de ellas: Bárbara Lennie.
La ganadora del Goya por Magical Girl daba el pasado lunes una doble lección de estilo. Por la mañana, para la presentación de su último trabajo cinematográfico, Una especie de familia - filme que pone sobre la mesa la dificultad de la adoptar hijos en Argentina-, la madrileña apostaba por un espectacular vestido firmado por Nina Ricci.
Un diseño de la colección otoño – invierno de la firma confeccionado en seda de color azul marino e inspiración cowboy. Con el cuello y las hombreras en color dorado, Lennie combinó su vestido - batín de manga francesa y bajo asimétrico por debajo de la rodilla con unas discretas sandalias de tiras de la firma Lodi.
Haciendo gala de su naturalidad, la actriz española recogió su pelo en un sencillo moño bajo con raya lateral y maquiló su rostro de forma sutil. Sin pendientes, anillos, pulseras, ni ningún otro tipo de accesorio, Bárbara demostró que una simple pieza puede ser más que suficiente para brillar.
Por la noche, los tonos dorados sobre oscuros volvieron a ser protagonistas en el look de Lennie. Con un mini vestido de color negro con lentejuelas bordadas, pailletes y plumas en la parte baja de la pieza, la actriz mostró su imagen más sobria y elegante. Un diseño firmado por Chanel, perteneciente a la colección Metier D’arts 2016 – 2017 de la casa francesa.
Un vestido con una enorme personalidad que incorporaba todos los ingredientes característicos de la icónica Maison. Con él, Bárbara volvió a conseguir que la atención de los fotógrafos se centrase una vez más en ella. Y si por la mañana decidía prescindir de todo tipo de complementos, en esta ocasión la actriz completó su ‘outfit’ con uno de los exóticos bolsos que integran la nueva colección de la firma creada por Coco Chanel y que recuerda a los típicos colgadores que se colocan en las puertas de las habitaciones de hotel. Un 'mini bag' de lentejuelas cuyo precio supera los 4.500 euros.
Quizás la parte más llamativa de su estilismo fuese el espectacular vestido, sin embargo, la original forma de combinarlo con unas botas ‘over the knee’ de Stuart Weitzman (840 euros), no pudo pasar desapercibidas.
