Dicen que la distancia es el olvido, pero en el caso de Telma Ortiz y Jaime del Burgo no ha sido así. Después de presentar la demanda de divorcio el pasado 28 de marzo, el matrimonio ha decidido darse una segunda oportunidad solicitando el desistimiento de la demanda a principios de mayo. Lejos de poner punto y final a esta historia de amor, la hermana de la Princesa de Asturias y el abogado han retomado su relación tras un periodo de reflexión, en el que se han dado cuenta , que a pesar de la distancia, su amor es mucho más fuerte.
La principal culpable de que ambos decidieran acabar con su matrimonio, no fue otra que la distancia, y los continuos viajes que impedían que ambos pudieran tener una vida en común. Él entre Londres y Ginebra y ella en Barcelona, donde reside junto a su hija Amanda, la hija que tuvo con el abogado Enrique Martín Llop y el principal motivo por el que Telma continúa residiendo en la Ciudad Condal y no en Nueva York, donde en un primer momento pensaron en residir juntos.
Y mientras buscan un nuevo horizonte para su relación, Telma continúa con su vida cotidiana en Barcelona donde trabaja de directora de relaciones Internacionales de la Fundación Universitaria Eserp , una de las escuelas de negocios más prestigiosas de España, y donde es muy normal verla llegando conduciendo su propia moto. Por su parte, Jaime del Burgo, continúa también con sus proyectos empresariales en Suiza y solo el tiempo y el amor decidirán hacia donde se encamina su relación.
