Miguel Báez 'Litri' y su mujer Carolina Herrera, visitan a Enrique Ponce en el hospital antes de ser operado con éxito de la clavícula

El torero sufrió una grave cogida el pasado martes, 18 de marzo, en la Feria de Fallas de Valencia

Por hola.com

Acompañado por los suyos y sin perder el ánimo, así es como se recupera Enrique Ponce de la fatal cogida que sufría el pasado 18 de marzo en la corrida de la Feria de Fallas en la que compartía cartel con Julián López 'El Juli' y Jesús Duque. El diestro que fue sorprendido por el toro al entrar a matar, sufrió fractura de la clavícula izquierda y una extensa cornada en la axila derecha.

 

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Tras ser intervenido en la enfermería de la plaza, Enrique Ponce ingresó el Hospital Casa de Salud Valencia desde el que fue trasladado al hospital Nisa Pardo de Aravaca (Madrid) para estar al lado de su familia, sin duda, su mejor medicina.

Ayer el diestro era intervenido con éxito de la fractura de clavícula tras ponerse en manos del doctor Ángel Villamor, quien tras la exploración física y las pruebas confirmó el diagnóstico de "fractura de clavícula izquierda con estallido de varios fragmentos".

 

 

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La intervención duró algo más de dos horas y consistió en la reconstrucción y estabilización de todos los fragmentos óseos con una placa de titanio diseñada para adaptarse perfectamente a la forma de la clavícula del torero. Además, curaron la herida que presentaba Ponce en la axila derecha.

Antes de la intervención, el torero recibía la visita de su amigo y compañero Miguel Báez 'Litri', quien llegó al hospital de la mano de su mujer Carolina Herrera, para interesarse por el estado de salud de su amigo y darle fuerza y ánimos antes de la operación.

 

 

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Victoriano Valencia, suegro de Enrique Ponce y padre de su mujer, Paloma Cuevas, también se acercó hasta el centro médico para estar al lado del torero en estos difíciles momentos, señalando: “Ha pasado una noche infernal, no ha podido dormir en toda la noche”. Pendientes de la operación, aunque afortunadamente ha ido muy bien, Victoria comentaba también cómo se encontraba su hija: “Pues imagínate, está preocupadísima”.