Iker Casillas y Sara Carbonero acuden a una de las últimas revisiones antes de ser padres

La periodista saldrá de cuentas en los próximos días y por este motivo el guardameta no ha viajado a Qatar con el Real Madrid

Por hola.com

Iker Casillas cuenta los días para ser padre. Su novia, Sara Carbonero, se encuentra de baja desde hace dos semanas, e Iker ha decidido pasar los días de la recta final del embarazo con ella, siendo el gran ausente en la última expedición del Real Madrid al extranjero.

 

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Hoy jueves, la pareja ha acudido al Hospital Ruber Internacional de Madrid, donde la periodista se ha hecho todas las revisiones y donde está previsto que nazca su bebé. Sara llegaba en un taxi y después se reunió con Iker, quien tras terminar esta visita médica, acercó su coche hasta la puerta para esperarla. Esta es una de las últimas revisiones médicas a las que va, ya que, como dijo el capitán del equipo blanco en el programa El Hormiguero, la presentadora de deportes de Informativos Telecinco saldrá de cuentas en los próximos días.

 

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Con el año nuevo, el Real Madrid ha viajado sin Iker hasta Doha, donde hoy disputarán un partido amistoso. El equipo ya ha aterrizado en la capital de Qatar, pero lo ha hecho sin el guardameta, que ha preferido quedarse ante el inminente nacimiento de su primer hijo. Y es que el feliz acontecimiento podría producirse muy pronto: está previsto que el primogénito de Sara e Iker llegue al mundo los próximos días.

 

 

Pese a la proximidad del momento, la periodista y el portero del Real Madrid no han renunciado a viajar para celebrar las Navidades en compañía de sus seres queridos. La pareja ha pasado las fiestas entre Corral de Almaguer, tierra natal de Sara, y Navalacruz, el pueblo de los abuelos de Iker. Los futuros padres también parecen haber dado la bienvenida al nuevo año por todo lo alto y han felicitado el 2014 a sus seguidores a través de las redes sociales, mostrando su alegría ante el estreno del año en el que se producirá la llegada de su primer hijo.

 

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La proximidad del nacimiento ha llevado a Iker a quedarse junto a Sara, pendiente de que la periodista salga de cuentas. La pareja afronta el momento con ilusión y sin miedo, tal y como ya afirmó Sara Carbonero: "Tengo muchas ganas de tener a mi hijo en brazos. De tener algún temor, que no lo tengo, sería a enfrentarme a una situación nueva sin saber si estaré o no a la altura de las circunstancias".