La dirigente socialista Trinidad Jiménez ha vivido uno de los fines de semana más difíciles de su vida tras haber tenido que despedirse de su padre, José Jiménez Villarejo, que falleció este domingo a los 84 años. Casado y con nueve hijos, era magistrado emérito del Tribunal Supremo (TS) y ex fiscal y obtuvo, entre otras condecoraciones, la Gran Cruz del Mérito Militar con distintivo blanco.
Vestida de riguroso luto y visiblemente abatida, Trinidad llegó al tanatorio madrileño de San Isidro arropada en todo momento por el que ha sido, sin duda, su mayor apoyo en estos difíciles momentos, su marido, el cámara Miguel Ángel de la Fuente, con el que contrajo matrimonio el pasado 27 de julio en una íntima ceremonia oficiada en la Casa de la Panadería, en la Plaza Mayor de Madrid. Hasta el tanatorio se acercaron también allegados y amigos de la familia, entre los que pudimos ver a Baltasar Garzón.
José Jiménez Villarejo, nacido en Málaga en 1929, fue fiscal en la Audiencia de Sevilla, en la de Málaga y Huelva, y en diciembre de 1982 fue nombrado, en el primer Consejo de Ministros del primer Gobierno socialista, teniente fiscal del Tribunal Constitucional (TC). En julio de 1986 fue elegido para integrar la Sala Segunda del Tribunal Supremo (TS), tribunal en el que fue nombrado presidente de la Sala Quinta de lo Militar dos años después. Posteriormente, en 1997 fue nombrado presidente de la Sala Segunda de lo Penal del Supremo, en la que intervino en casos como Argentia Trus, de Mario Conde, y el GAL. Abandonó la presidencia de la sala de lo penal del Tribunal Supremo en 1999 y en 2002 fue nombrado magistrado emérito.
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