Rodeado de los suyos como no podía ser menos, Cristiano Ronaldo hizo un repaso a lo que ha sido su carrera deportiva, una trayectoria que, pese a su juventud, le ha consolidado como una de las estrellas del fútbol. El jugador del Real Madrid abrió las puertas de un museo en el que se reúnen varios objetos que resumen a la perfección lo que ha sido su camino por el mundo del deporte. Su tierra natal, Madeira, es la que tendrá la oportunidad de albergar este centro por el que seguramente peregrinarán un buen número de seguidores del astro, que no podía ocultar su felicidad. “Por supuesto que es un día muy especial y bonito para mí, espero que también lo sea para Madeira” dijo el portugués que añadió que la idea ha sido de su hermano Hugo. “Fue una iniciativa suya” comentó.
Sin duda entre los objetos más destacados están sus trofeos, como el Balón de Oro que ganó en 2008, un premio que espera repetir este año y para el que ha dejado ya un hueco. “Tengo espacio para más trofeos. No quiero mencionar ninguno en concreto. Todo lo que quiero es ganar más y si llega el Balón de Oro, aquí hay espacio suficiente”. Este galardón se anuncia el 13 de enero. “El premio al jugador del año de World Soccer fue otro trofeo importante pero no significa que ganaré el Balón de Oro. Espero que sea así, pero no estoy obsesionado con ello” comentó.
Él no fue el único protagonista de la cita, ya que todos los flashes se centraron en otra pequeña estrella. Su hijo Cristiano Jr., un precioso niño de más casi cuatro años, que posó con su padre. Simpático y mirando todo con curiosidad, el pequeño se unió a su abuela y una de sus tías, Elma, en los rincones más representativos y demostró su espontaneidad con gestos y muecas.
No faltó tampoco la novia del deportista Irina Shayk, espectacular con un vestido blanco y el pelo suelto, saludó a los invitados que pasearon por la muestra. Irina está muy integrada en la familia de su novio, tal y como se puede comprobar una vez más en estas imágenes.
