Luis Alfonso de Borbón y su mujer, Margarita Vargas, han acompañado a la infanta doña Pilar de Borbón, presidenta de honor de la Fundación Nuevo Futuro, que explicó ayer todos los proyectos que ha llevado a cabo esta fundación durante el 2010 y presentó la nueva edición del famoso Rastrillo Nuevo Futuro, que abrirá sus puertas el próximo viernes 18 de noviembre en el recinto de la Casa de Campo de Madrid, hasta el domingo 27. Junto a ellos, también estuvieron la presidenta nacional de Nuevo Futuro, Pina Sánchez Errazuriz, y Miguel Ángel Villanueva, delegado de Economía del Ayuntamiento de Madrid y presidente de Madrid Espacios y Congresos.
PINCHE SOBRE LA IMAGEN PARA VER LAS AMPLIACIONES Y MÁS FOTOGRAFÍAS
Margarita Vargas, además de asistir a esta presentación, va a trabajar los diez días que esté abierto el rastrillo en uno de los puestos, como ya ha hecho en ediciones anteriores, y está muy contenta por ello: “Es un honor estar aquí y poder colaborar. Les invito a todos a que vengan a colaborar, ahí estaré todos los días, así que pueden venir a verme y lo más importante, que cada uno ponga su granito de arena”. Y asegura que allí, todo el que se acerque podrá encontrar de todo: “Regalos, ropa de niños, collares, bolsos, lazos, todo lo que te puedas imaginar, hay variedad para todo el mundo y para todos los gustos”.
La pareja con sus tres hijos, Eugenia y los mellizos, Luis y Alfonso, ahora están viviendo en España y Margarita comentó que están muy felices con el cambio: “Mi marido es español y siempre las raíces tiran”. Aunque no sabe cuánto tiempo se quedarán en Madrid: “Nunca se sabe, pero estamos muy contentos y los niños están muy bien”. Durante los días que ella esté trabajando en el rastrillo, cuenta que entre su marido y algunos familiares se ocuparán de los niños y que tiene pensado llevarse un día a Eugenia, que ya tiene cuatro años, para que le eche una mano con las ventas: “Igual me llevo a la mayor a ayudar algún día”. También habló de sus niños: “Los mellizos están fenomenal. La verdad es que están muy bien, muy mayores, con un año y medio y ya caminando. Hay uno que es clavado a mi marido y sobre el otro, hay opiniones diversas, pero yo creo que terminará pareciéndose a él”.
