Cumplir más de cien años ya es un logro en los tiempos que corren. Es más de un lustro el que lleva a sus espaldas una de las bodegas con más soleras del panorama vitivinícola. Hablamos de la prestigiosa bodega González Byass, que se fundó en el año 1835. Después de 175 años desde su creación, la firma quiso conmemorar este aniversario de una forma muy especial.
La singular Bodega Tío Pepe, que es conocida en el mundo entero, acogió una original velada a la que asistieron más de quinientos invitados, entre los que se encontraban numerosas caras conocidas del panorama nacional que quisieron acompañar a la centenaria bodega en un día tan especial como este, festejándolo por todo lo alto en las inmediaciones de una parte de la bodega.
No faltaron a la velada Carmen Martínez-Bordiú y su marido, José Campos, a quienes les une una buena relación con Jerez, ciudad donde tienen muchos amigos y donde se sienten muy cómodos cuando están en esta localidad gaditana famosa por sus caballos y su vino. La presentadora y televisiva Carmen Lomana, enfundada en un Alberta Ferreti dorado, nos dijo que está encantada y feliz con todo lo que le está regalando la vida: “No le puedo pedir más, soy inmensamente feliz y afortunada.”
También asistió el torero Óscar Higares con su esposa, Sandra Álvarez, que llevaba un vestido largo dorado con el que se apreciaba su embarazo de siete meses. La pareja, que está feliz e ilusionada ante la llegada de su tercera hija, no nos quiso desvelar el nombre que le pondrán a la pequeña, aunque si nos aseguraron que a una de sus hijas le gusta el nombre de Carlota.
Antonia Dell´Atte, Beatriz de Orleans, la cantante Pastora Soler junto a su marido, Francis Viñolo, la diseñadora Vicky Martín-Berrocal o Tony Benítez, entre otros, fueron algunos de los rostros conocidos que completaron la larga lista de invitados a este gran aniversario. La actriz y vedette Norma Duval, que tenía confirmada su asistencia junto a su pareja, el empresario Mathias Khün, no pudo finalmente estar en este acontecimiento.
A lo largo de la cena, todos los invitados fueron agasajados con un gran número de sorpresas que les hicieron descubrir, comprender y sentir cada uno de los procesos que vive el vino antes de llegar a las copas, con las que en la noche de la fiesta se brindó por los 175 años de constancia de esta gran empresa familiar. Pero quien causó furor entre los allí presentes fue Carmen Martinez-Bordiú, quien deleitó a los invitados con sus bailes después de la cena con la que fueron agasajados.
Enfundada en un vestido negro con vuelo, Carmen bailó la última de las piezas después de disfrutar como una espectadora más de las coreografías de los bailarines de su recién estrenada compañía. Carmen, que supervisó personalmente al milímetro tanto la puesta en escena como las composiciones, acabó dejándose llevar por la música, demostrando a los invitados allí congregados su pasión por el baile.
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