Lloró como un niño, y no era para menos. Las lágrimas de Iker Casillas tras el gol de Andrés Iniesta que ha dado la victoria del Mundial a España son una de las imágenes de esta noche mágica que pasarán a las historia. El capitán del equipo español no pudo contener las lágrimas y cayó de rodillas al suelo cuando el polémico árbitro pitó el final del partido. Todos los jugadores se abrazaron y, con las emociones a flor de piel, recibieron la ansiada Copa del Mundo. Y allí, en el césped, Iker también abrazó a su novia, la periodista de Telecinco Sara Carbonero, aunque lo mejor estaba aún por llegar.
Después, en el túnel de vestuarios, Iker fue entrevistado por Sara y no pudo reprimir sus emociones cuando ella le preguntó de quién se acordaba en ese momento. “Estoy súper alegre y contento. Nos lo hemos merecido por fin y se lo agradezco a la gente que me ha apoyado siempre, a mis padres, a mi hermano…” y con la voz entrecortada por las lágrimas guardó unos segundos de silencio en los que Sara le dice que no pasa nada, que le comente cómo ha ido el partido, pero Iker dice que no y termina la frase diciendo: “A mis amigos y a ti”, y le da un apasionado y espontáneo beso en los labios, tras el que la periodista se queda sin palabras y devuelve la conexión a J. J. Santos.
Después de estas románticas imágenes, que ya han dado la vuelta al mundo, Casillas ha hablado con la prensa de este ya famoso beso: "Ha sido espontaneidad, somos de la calle, campechanos, gente normal".
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