Se llama Miriam González Durantez y el próximo 6 de mayo podría cambiar su residencia londinense para vivir en el número 10 de Downing Street, la residencia de los Primeros Ministros de Gran Bretaña, y convertirse en Primera Dama. Su marido, Nick Clegg, es el líder del Partido Liberal-Demócrata y uno de los candidatos a ser el próximo primer ministro. Su partido es la tercera fuerza política del país y competirá en las urnas contra Gordon Brown, el actual primer ministro y líder del Partido Laborista, y contra el conservador David Cameron.
Natural de Olmedo, una localidad vallisoletana de 4.000 habitantes, esta abogada de 41 años se ha convertido en el mejor apoyo de su marido en su carrera hacia la victoria de las próximas elecciones generales y con ello en permanente actualidad no sólo en la prensa británica, sino también en la mundial. Los medios destacan que es la única de las tres mujeres de los candidatos que no participa en la campaña y que continúa con su trabajo como responsable del departamento de comercio en el bufete legal DLA Piper, además de ensalzar su discreción, su profesionalidad y su estilo y elegancia.
Miriam ha vivido la política desde que era pequeña porque su padre, José Antonio González Caviedes, fallecido en 1996 a los 58 años a causa de un accidente de tráfico, fue alcalde de Olmedo, senador de la UCD en Madrid por Valladolid y miembro del Partido Popular. Su madre, Mercedes Durántez, es profesora en el Instituto de Olmedo y Miriam estudió Derecho en la Universidad de Valladolid. Su primer trabajo fue en el gabinete del eurodiputado Chris Patten en Brujas, y cuando se trasladó a Londres, después de su boda, estuvo un tiempo en el Ministerio de Asuntos Exteriores. Además, trabajó como negociadora en el equipo del comisario europeo de comercio Leon Brittain en la Organización Mundial del Comercio. Por eso, cuando su marido le comunicó que quería dedicarse a la política, a ella le gustó mucho la idea y le dijo que le apoyaría en todo momento.
Su historia de amor comenzó en Brujas
Miriam González y Nick Clegg se conocieron en Bélgica, mientras estudiaban en el Colegio de Europa de Brujas. “Los dos estábamos estudiando allí el mismo curso de postgrado y había una amiga que estaba muy enamorada de él. Yo empecé a ayudarla y en el proceso la que me enamoré fui yo. Empezamos muy pronto a salir”, dijo en una entrevista concedida a El Mundo. Al principio hablaban en francés y después en inglés, aunque más tarde Nick, que domina también el holandés, alemán y ruso, aprendió español. Cuenta Miriam que, cuando viajó por primera vez a Valladolid, llegó escuchando en el coche unas cintas de clases de español y tenía un acento mexicano muy gracioso.
Desde entonces todo fue sobre ruedas, se casaron en Olmedo en el año 2000 y tienen tres hijos: Antonio, de siete años, Alberto, de cuatro, y Miguel, de uno. En la misma entrevista, Miriam se declaraba muy orgullosa de su imagen diciendo: "Soy de Olmedo, soy española y me he hecho más española en el extranjero; además, soy muy castellana y me gusta serlo porque los castellanos somos muy austeros, nobles y leales." En declaraciones al citado periódico, que recoge también la revista ¡HOLA!, Miriam dijo también que su marido es "el mejor hombre del mundo", aunque tiene un defecto: “Es un desastre total en la cocina.”
