Miyuki Hatoyama, Primera Dama de Japón, revela su viaje espacial a Venus

Ya era una estrella de televisión en su país antes de que su marido ganara las elecciones y en su libro relata sus curiosas experiencias con los OVNIS, de la misma forma que asegurá que conoció a Tom Cruise en otra vida

Por hola.com

Miyuki Hatoyama, de 66 años, lleva muy pocos días ejerciendo de Primera Dama de Japón, pero ya está dando mucho que hablar. Y es que la esposa del recién elegido Primer Ministro de Japón, Yukio Hatoyama, cuenta tal y como dice el título de su libro Cosas muy extrañas que me han pasado.

Miyuki no duda en afirmar que un día mientras dormía su alma fue secuestrada por un objeto volador no identificado, (OVNI), de forma triangular que la llevó a Venus, un planeta "muy hermoso y muy verde". Además, y por si esto fuera poco, asegura que en otra vida conoció al actor Tom Cruise reencarnado en un japonés.


No contenta con estas revelaciones, la Primera Dama japonesa afirmó en una entrevista de televisión que se come el sol, mientras lo escenificaba levantando los brazos y haciendo que se comía una estrella solar imaginaria. Miyuki no era desconocida en Japón, ya que anteriormente a la elección de su marido como Primer Ministro ya era toda una estrella de la televisión y de las revistas, donde contaba sus extrañas experiencias.

Conoció a su marido en California, cuando Yukio estudiaba en la Universidad de Standford, y al poco tiempo de iniciar su relación decidieron casarse. Curiosamente, su esposo es conocido en Japón como “el Alien”, al parecer por la forma de sus ojos, aunque según afirma su esposa es por su nueva forma de hacer política en el país.




Cuando era joven, Miyuki se formó en artes escénicas y perteneció a la compañía del popular teatro musical Takarazuka. Además, ella misma se define como una mujer “muy curiosa” y, quizás por ello, emplea el tiempo libre en la confección de objetos de cristal de colores, de cerámica, al cultivo de verduras o en escribir libros de cocina con sus propias recetas, entre otras aficiones. Aunque sin duda, por lo que más sorprende la Primera Dama japonesa es por sus apasionantes vivencias espaciales.