El heredero Agnelli, de vacaciones en Portofino mientras su madre reclama más de 1.400 millones de euros de la herencia

Margherita Agnelli, única hija viva del desaparecido Gianni Agnelli, pelea judicialmente por un dinero que asegura está oculto en paraísos fiscales

Por hola.com

Las herencias dividen hasta a las mejores familias. Y si no que se lo digan a una de las familias más acaudaladas de Europa: los Agnelli. Desde la muerte del patriarca, Gianni Agnelli, en enero de 2003 el reparto de sus bienes ha mantenido en litigio a su hija con su esposa y sus nietos. Margherita Agnelli de Pahlen, de 53 años y única hija viva del fundador de la Fiat tras la muerte de su hermano Edoardo hace nueve años, mantiene desde hace dos una encarnizada batalla legal para que se esclarezca la herencia de Agnelli, ya que se está ocultando una fortuna de 1.463 millones de euros en paraísos fiscales. Eso al menos es lo que ella asegura en su memoria final del juicio que se lleva adelante en los tribunales de Turín.



Margherita Agnelli se enfrenta a su madre, Marella Caracciolo, por la herencia de su padre


Su lucha en los tribunales ha enfrentado a la hija de Agnelli a su propia madre y viuda de Gianni, Marella Caracciolo, ya que Margherita no está conforme con el acuerdo por el cual se repartió la herencia de su padre hace cinco años. Sin embargo, los ataques más directos de Margherita se centran en los tres hombres de confianza que tenía Gianni Agnelli: el abogado Franzo Grande Stevens; el albacea de la familia, Gianluigi Gabetti; y el suizo Siegfried Maron. Los dos primeros afirman manejar sólo los activos societarios, pero Margherita dice que son administradores de todos los bienes paternos y asegura que existen en el exterior propiedades y posiblemente otras firmas ignoradas por ella y por su madre.

La hija de Gianni argumenta su tesis en una serie de documentos en los que se recogen complejas operaciones financieras, según el diario La Repubblica, que se realizaron entre Suiza, Luxemburgo, Liechtenstein, Estados Unidos y algunos paraísos fiscales caribeños, siendo la principal la “Opa Exor” de 1998. Dicha operación, según apunta Margherita, pudo realizarse gracias al préstamo de 1.300 millones de dólares realizado por David Rockefeller, gran amigo de Agnelli, que más tarde fue devuelto.



Los tres hijos mayores de Margherita (Lapo, Ginevra y John) no mantienen relación con ella


La hija del Avvocato afirma que no reclama el dinero (el 2 de marzo de 2004, recibió de su padre 125 millones de euros en efectivo, un cheque de 100 millones de euros, obras de arte por valor de 500 millones, varios inmuebles en Roma y Turín y la residencia familiar de Villa Perosa). Lo que ella quiere es que se esclarezcan las cuentas por el bien de sus cinco hijos pequeños, nacidos de su segundo matrimonio con Sergio de Pahlen: Pietro, Sofía, María, Anna y Tatiana. Los tres mayores, que tuvo con el escritor Alain Elkann –John, Lapo y Ginevra (que se casó el mes pasado)–, no mantienen relación alguna con ella y defienden a su abuela Marella, que tampoco se habla con su hija.



John Elkann, el heredero Agnelli, pasa unos días en Portofino con su esposa y sus dos hijos


Y mientras se recrudece la pugna familiar en los tribunales, John Elkann, nieto mayor de Gianni Agnelli e hijo de Margherita, nombrado por su abuelo su sucesor en 1996 y actual vicepresidente de Fiat, disfruta de unos días de descanso en Portofino. Allí le hemos visto acompañado por su familia: su esposa, la aristócrata italiana Lavinia Borromeo, y sus hijos, Leone y Oceano. Quizá el heredero del imperio Agnelli ha decidido realizar esta escapada para relajarse antes de que se conozca la sentencia final del proceso judicial que le tiene enfrentado a su madre, pues él controla las acciones de las sociedades financieras claves de la compañía. La resolución judicial será dictada el próximo 30 de junio.